WASHINGTON.- El Presidente estadounidense, George W. Bush, afirmó hoy, viernes, que la derrota del régimen de Saddam Hussein en Irak ha supuesto que la red terrorista Al Qaeda "ha dejado de tener un aliado".
En un discurso en una planta de fabricación de armamento en la localidad californiana de Santa Clara, Bush dijo que aunque los combates en Irak han terminado, "aún tenemos pendientes compromisos en ese país".
"Pondremos orden en las partes de Irak que son peligrosas, atraparemos a los dirigentes del antiguo régimen y les haremos responder de los crímenes atroces que han perpetrado contra el pueblo iraquí", agregó.
El Presidente declaró ayer, jueves, desde el portaaviones "Abraham Lincoln" el final de la campaña militar en el país árabe.
Hoy, Bush también reiteró que continúa la búsqueda de armas químicas y biológicas, "que sabemos que Sadam Husein tenía antes de nuestra entrada en Irak" y que se convirtieron en el argumento esgrimido por EE.UU. para iniciar las hostilidades.
El Presidente aludió además a la situación económica en Estados Unidos, su principal prioridad una vez que se ha pasado página en Irak.
Desde enero de 2001 se han perdido más de dos millones de puestos de trabajo en Estados Unidos, donde la cifra de desempleo se sitúa en el 6 por ciento según los datos oficiales hechos públicos hoy.
Para reactivar la economía, que no termina de despegar desde la breve recesión de 2001, Bush ha propuesto un plan de recortes fiscales de 550.000 millones de dólares en diez años, una propuesta que se espera que el Congreso vote la semana próxima.
Los críticos del plan consideran que tan sólo beneficiará a los más pudientes y contribuirá a agravar el déficit fiscal, que ya de por sí alcanza cifras récord.
En su discurso hoy, Bush afirmó que "a mi juicio, y al juicio de muchos economistas..., la mejor manera de crear crecimiento económico es dejar que la gente conserve más de su dinero".
El plan de recortes fiscales "supondrá más dinero en las arcas de las pequeñas empresas. Más dinero en sus arcas supone más inversión. Más inversión supone más puestos de trabajo para los estadounidenses", sostuvo.
El Presidente estadounidense se reunirá en las próximas horas con el primer ministro australiano, John Howard, cuyo país ha sido uno de los principales aliados de EE.UU. en la guerra contra Irak.
Ambos mandatarios se trasladarán al rancho texano de Bush en Crawford, donde Howard permanecerá hasta mañana, sábado.