CIUDAD DEL VATICANO.— El Papa Juan Pablo II expresó el martes un enérgico rechazo a los actos terroristas que enlutaron el lunes a Colombia con el asesinato de un ex ministro de justicia, un gobernador departamental y ocho militares, y pidió consuelo para las víctimas de la violencia.
En un telegrama enviado al arzobispo de Medellín, Alberto Giraldo Jaramillo, el Papa expresó su "enérgica reprobación a los actos de terrorismo que atentan contra la pacífica convivencia y ofenden los sentimientos más profundos del ser humano".
El Pontífice describió los asesinatos como un "atentado execrable" y pidió que "Dios conceda su consuelo e inspire sentimientos de concordia a quienes lloran las trágicas consecuencias de la violencia".
Manifestó además su deseo de que Colombia marche hacia una "deseada pacificación".
El gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria, y el ex ministro de Defensa Gilberto Echeverri, secuestrados por las guerrillas izquierdistas de Colombia, fueron asesinados junto con ocho militares cuando intentaban rescatarlos.
Habían sido secuestrados en abril de 2002 por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, cuando encabezaban una marcha en favor de la paz.
El asesinato tuvo lugar en una zona rural del municipio de Urrao, a 300 kilómetros al noroeste de Bogotá.