PARÍS.- Osama bin Laden murió en diciembre de 2001 en las montañas de Afganistán donde se refugiaba con otros miembros de su organización terrorista Al Qaeda, perseguidos por las tropas estadounidenses, según una investigadora francesa, que ha estudiado sus apariciones televisivas.
Ghislaine Alleaume, historiadora arabista del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS) considera que la última aparición televisiva con vida de Bin Laden fue la que la cadena Al Jazeera emitió el 27 de diciembre de 2002, publica hoy "Le Figaro".
"En el video, Bin Laden aparecía débil y delgado. Parece que tiene amputado el brazo derecho", que se trata de disimular con una bolsa de tela de camuflaje militar del mismo tono que su chaqueta, según Alleaume, que está convencida de que "resultó herido en los bombardeos de Tora Bora".
"Dadas las condiciones sanitarias en Afganistán en ese momento, no era fácil resistir a una amputación", dice la investigadora, que precisa que hay diversos indicios que permiten suponer que ese video se había grabado "en los diez primeros días de diciembre".
Recuerda que el 9 de ese mismo mes un mensaje del líder de Al Qaeda había aparecido en decenas de sitios Internet vinculados al integrismo islámico en el que se reproducían tres versículos del Corán que hacían alusión a una derrota de los musulmanes.
"Estos versículos se podían entender como una exhortación al valor en el momento del ataque estadounidense (al régimen talibán) en Afganistán. Pero si se tiene en cuenta el mensaje, presentado en ciertos sitios Internet como el testamento de Bin Laden, adquieren otra resonancia", argumenta la historiadora.
"A partir de ese momento, han aparecido cantidades de recomposiciones posibles de la figura del personaje en un modo muy hagiográfico", añadió.
En cuanto a los mensajes posteriores atribuidos a Bin Laden -no hay ningún nuevo video ni fotografía- Alleaume afirma que se trata de montajes de sus seguidores, y para ello muestra algunos cambios reveladores.
En primer lugar, dice, en un texto hecho público en enero de 2002, la firma es distinta de la que solía utilizar el líder de Al Qaeda, ya que incluye el nombre de su padre, lo que "añade una dimensión apocalíptica".
"A partir de enero de 2002, la firma Mohamed se hizo recurrente. Apareció también el nombre de su hijo, Abú Ahmed", explica la investigadora, que piensa que en ese caso "era el hijo el que hablaba".