RIYAD.— Cuatro explosiones remecieron la capital saudíta horas antes de una visita del secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, con atentados con carros bomba en complejos de viviendas donde se alojan occidentales.
Diversas fuentes dijeron que entre una y tres personas murieron y que los heridos pasan de cincuenta.
Las explosiones se produjeron en rápida sucesión, la última de ellas en la madrugada del martes frente a la sede de una empresa estadounidense-saudí.
El portavoz de la embajada de EE.UU. en y, John Burgess, confirmó que ciudadanos estadounidenses residían en los tres complejos de viviendas que fueron blanco de las primeras explosiones.
Otro portavoz diplomático precisó, por su parte, que no podían confirmar que todas las explosiones hubieran sido provocadas por coches-bomba.
Tres complejos occidentales fueron atacados, dijo un estadounidense residente en una de las zonas donde se produjeron las explosiones, en un mensaje a la AP por correo electrónico. Las propiedades sufrieron graves daños, dijo, y añadió que le parecía que hubo algunos muertos.
Un funcionario que viaja con Powell dijo que se les comunicó que no había estadounidenses entre los muertos.
Powell, de visita en Jordania, viajará a Arabia Saudí el martes tal como está previsto, dijo la fuente, que habló con la condición de no ser identificada.
El jefe de la diplomacia estadounidense quiere pedir a los saudíes que ayuden a controlar los grupos milicianos y promover la reforma de la Autoridad Palestina. Powell ya ha visitado Israel. Cisjordania y Egipto.
Un oficial de seguridad saudí dijo a la AP que un automóvil Chevrolet Caprice negro se estrelló en un complejo residencial en Garnata, un suburbio del este de Riyad. Añadió que la explosión provocó varios heridos.
Testigos dijeron que la fuerza de la explosión estremeció edificios cercanos. También dijeron haber escuchado disparos antes de la explosión.
Cientos de policías antimotines y de la Guardia Nacional convergieron sobre el complejo, que fue evacuado. La propiedad pertenece al vicegobernador de Riad, Abdula al-Blaidh, y la mayoría de sus residentes son extranjeros, occidentales en particular.
La cuarta explosión se produjo frente a la sede de la Saudi Maintenance Company, también llamada Siyanco, la madrugada del martes.
La empresa pertenece a Frank E. Basil, Inc., de Washington, y socios locales.