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Ilegales mueren encerrados en remolque abandonado en Texas

Dieciocho perecieron por asfixia y 44 sobrevivieron. Autoridades norteamericanas arrestaron al propietario del vehículo.

14 de Mayo de 2003 | 19:13 | EFE
HOUSTON.- Las autoridades siguen buscando a más supervivientes de la tragedia de los inmigrantes encerrados en un remolque abandonado en Victoria (Texas), que ha causado 18 muertos, entre ellos un bebé.

El jefe de la policía del condado de Victoria, en el sur de Texas, Michael Ratcliff, señaló en una conferencia de prensa que otras 44 personas sobrevivieron al encierro en el remolque y que cuatro han sido ingresadas en un hospital de Victoria.

"Estuvieron encerradas durante un día y medio. Tienen una gran historia que contar y están muy agradecidos de estar con vida", dijo una portavoz del hospital.

Asa Hutchinson, subsecretario de Seguridad Fronteriza y Transporte, señaló en Washington que "se trata de la peor pérdida de vidas en la historia reciente en lo que parece ser un caso de contrabando de personas".

Hutchinson añadió que "se ha dado la más alta prioridad a la investigación", de ese caso, e indicó que "este sombrío hallazgo es un recordatorio horrible del desprecio al cargamento humano por parte de estos contrabandistas".

Las autoridades federales han dicho que existen sospechas de que los inmigrantes ilegales fueron encerrados de manera premeditada en el camión.
Tyrone Williams, un residente legal de origen jamaiquino y bajo cuyo nombre estaba registrado el camión, fue arrestado en Bel Air, (Texas), pero hasta ahora no se han presentado cargos en su contra, dijo una fuente policial.

Un portavoz de la fiscalía del distrito indicó que se ha iniciado la búsqueda de otras dos personas; una mujer hispana y un hombre que "tal vez habla español".

Ahora, el objetivo es hallar a más supervivientes para impulsar la investigación.

"Hemos lanzado una alerta nacional para hallar a estas personas huidas del estacionamiento" en el que se encontraron los cadáveres, había dicho Ratcliff en una primera conferencia de prensa ofrecida en la mañana.

El jefe policial dijo que 13 cadáveres fueron encontrados en el interior del remolque, cuatro en un patio cercano y que otra persona del grupo falleció en la unidad de cuidados intensivos del hospital de Victoria.

Al parecer los inmigrantes murieron por asfixia y deshidratación, a causa de las altas temperaturas que había en el interior del tráiler.

Ratcliff informó de que se comunicó al consulado de México en la ciudad texana de Houston del hallazgo de los cadáveres, por tratarse "posiblemente de inmigrantes indocumentados".

"Queremos localizar a quienes se marcharon del lugar de esta terrible historia para prestarles asistencia médica", precisó Ratcliff, tras señalar que "de momento los huidos no tienen problemas con la justicia de EE.UU. y serán tratados como víctimas de un crimen".

Un portavoz del consulado de México en Houston, Marco Núñez, dijo a EFE que todavía no se tiene información oficial sobre el sexo, edad o nacionalidad de las víctimas.

"Se presume que entre los muertos haya mexicanos, pero no tenemos conocimiento" de ello, añadió Núñez.

El cónsul mexicano en Houston, Eduardo Ibarrola, se trasladó a Victoria junto con miembros del Departamento de Protección a los Mexicanos en el extranjero, para llevar a cabo las averiguaciones del caso, explicó el portavoz.

"Desde el primer momento que se supo del hallazgo de los cadáveres nos pusimos en contacto con las autoridades de Victoria y otras instituciones para, en caso de que haya mexicanos muertos, prestar la asistencia necesaria a sus familias", afirmó Núñez.

Este contrabando de extranjeros indocumentados pudo haber ocurrido el martes, de acuerdo a informaciones de miembros de los servicios de auxilio.

Supuestamente el chófer recogió a los indocumentados en el valle mexicano del Río Grande, cerca de la frontera con EE.UU., desde donde los introdujo a Texas.

Victoria, ciudad situada a unos 250 kilómetros de la frontera con México, es una de las áreas usada por los "coyotes" o contrabandistas de inmigrantes en sus viajes desde los estados mexicanos de Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León, que lindan con el sur de Texas.

Las autoridades policiales dijeron que acudieron al aparcamiento porque tenían informaciones de que se habían registrado incidentes en el lugar donde estaba el camión.
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