JEREZ DE LA FRONTERA.- Cinco países de la Unión Europea (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y España) han creado un grupo de trabajo para hacer un frente común en la lucha contra el terrorismo y resolver los problemas de la inmigración ilegal.
Con el convencimiento de que estos dos problemas son comunes a los ciudadanos de la UE, los ministros de Interior de esos cinco países se reúnen hoy y mañana en la ciudad española de Jerez de la Frontera para debatir propuestas y medidas que hagan frente al terrorismo internacional y a la inmigración ilegal.
El ministro español, Angel Acebes; el francés Nicolás Sakorzy, el alemán Otto Schily, el británico David Blunkett y el italiano Giuseppe Pisanu acordaron reunirse trimestralmente para analizar la evolución de esas políticas conjuntas en ambos campos.
Para ello han creado un grupo de trabajo formado por expertos de los cinco países que harán un seguimiento de esas políticas.
Acebes subrayó en rueda de prensa que esos dos problemas no pueden resolverse "de forma individual", ni ahora ni el futuro, por lo que consideró imprescindible "ponerse de acuerdo" con políticas generales de colaboración y coordinación.
Según Acebes, el terrorismo y la inmigración ilícita no requieren sólo soluciones inmediatas, sino nuevos instrumentos de cooperación de cara al futuro porque "sólo desde ella" pueden darse respuestas "adecuadas".
Cada tres meses los ministros de Interior de estos cinco países se reunirán, según Acebes, para analizar cómo evoluciona en cada estado y en la UE el terrorismo y la inmigración, y cómo en ambas materias se aplican políticas conjuntas y los efectos de éstas.
El ministro español aclaró que se aplicarán medidas comunes en materia de inmigración legal, con políticas de integración, acogida o de trabajo, y en el ámbito de la inmigración ilegal, en especial luchando contra las redes que trafican con seres humanos.
En el encuentro, los cinco ministros condenaron el atentado en Casablanca (Marruecos) y expresaron su convicción de que el terrorismo es la "mayor amenaza" de "nuestro sistema de convivencia".
"No pueden existir fronteras en la lucha contra el terrorismo", ni para los policías ni para los jueces, a la hora de una "agresión tan grave y seria", porque ningún Estado, concluyó Acebes, "no puede sentirse a salvo" del terrorismo islámico.