ROUIBA, Argelia.- Los equipos de rescate removían el jueves montañas de escombros en busca de sobrevivientes de un terremoto en la capital argelina y pueblos cercanos, que mató a más de 700 personas e hirió a casi 5.000.
El terremoto, que tuvo una magnitud de 6,7 en la escala abierta de Richter, hizo que la gente saliera presa del pánico a las calles de Argel, donde los edificios de algunos barrios resultaron dañados. Su intensidad fue tal que incluso se sintió en España.
"Hay muchos edificios destruidos. Hay familias enteras debajo", dijo el Primer Ministro Ahmed Ouyahia.
El funcionario habló del creciente número de muertos mientras los medios estatales pedían al personal médico que se presentara en sus centros de trabajo para brindar asistencia a las víctimas.
Los hospitales en la capital y las provincias más afectadas tenían serias dificultades para enfrentar la situación de emergencia. En la provincia de Boumerdes los cuerpos fueron apilados afuera de los centros médicos y los pacientes eran tratados al aire libre.
Las autoridades instaron a médicos y paramédicos a presentarse a los hospitales y a los ciudadanos a donar sangre.
La última cifra de muertos ofrecida por las autoridades a los medios de prensa estatales fue de 643 y más de 4.600 heridos. En la capital, Argel, al menos 57 edificios resultaron destruidos.
"Todo se derrumbó"
"Es muy difícil. El terremoto afectó todas partes. Tenemos tantos heridos", dijo un socorrista.
Uno de los lugares más afectados fue Rouiba, una ciudad relativamente próspera a unos 30 kilómetros de los suburbios orientales de Argel, donde un edificio tras otro quedó reducido a escombros.
"Nunca he visto un desastre semejante en mi vida. Todo se ha derrumbado", dijo Yazid Khelfaoui, quien perdió a su madre en el terremoto. Los escombros del edificio de departamentos donde vivía lo rodeaban.
La tierra comenzó a temblar a las 19.44 hora local (18:44 GMT) cuando la mayoría de las familias se hallaban en sus hogares dispuestas para cenar.
La televisión argelina mostró decenas de cadáveres cubiertos por sábanas, algunos que pertenecían a niños. Entre los heridos había un niño con el rostro ensangrentado. "Hay tantos heridos, no pudimos contarlos", indicó un atribulado médico.
La ciudad costeña de Boumerdes también resultó muy afectada. Según los medios, hubo gente que saltó por las ventanas para tratar de salvarse. La televisión estatal también reportó que un pequeño hospital en Boumerdes se había derrumbado, pero no ofreció más detalles.
"Es un momento trágico", dijo el primer ministro Ouyahia a la radio estatal. "Una desgracia que afecta a toda Argelia".
Ouyahia dijo que las fuerzas de seguridad estaban en alerta para evitar saqueos, en una nación azotada durante décadas por la violencia de rebeldes islámicos que ha causado la muerte de más de 100.000 personas y ha golpeado a la economía nacional a pesar de sus recursos de petróleo y gas natural.
La prensa estatal argelina interrumpió su programación para exhortar a la gente a salir de sus casas y permanecer alejada de los edificios.
Doscientas réplicas
Un corresponsal de Reuters en Argel dijo que el alto edificio donde se hallaba en el momento del terremoto se estremeció fuertemente durante segundos.
Unas 200 réplicas se sintieron en el norte de Argel durante las primeras dos horas y las autoridades advirtieron que podrían ocurrir más.
En el hospital principal de Argel, Mustafá, las familias se reunieron para averiguar sobre el paradero de sus seres queridos. La policía repelió una creciente multitud.
Francia envió 120 rescatiscas con perros y equipos de emergencia a su ex colonia.
La mayoría de los 32 millones de argelinos viven en el norte, lejos del desierto. Sólo en Argel viven al menos 2,6 millones.
El Centro Geológico Nacional de Información de Terremotos de Estados Unidos dijo que el epicentro del sismo se ubicó cerca de la población de Thenia, 70 kilómetros al este de Argel, y a unos 10 kilómetros de profundidad.
