WASHINGTON.- El hijo mayor de Saddam Hussein, Udai, busca entregarse a las fuerzas militares estadounidenses que invadieron Irak, pero aún no lo ha hecho por "la dura postura negociadora" de EE.UU., informó hoy el diario The Wall Street Journal.
El rotativo neoyorquino, que cita como fuente a "terceras partes con conocimiento de las discusiones", indicó que Udai Hussein "se oculta en un barrio residencial de Bagdad y quiere saber qué acusaciones se le imputarán y cuál será el procedimiento de interrogatorios y de detención en caso de entregarse".
Saddam Hussein también está vivo y en un barrio de Bagdad, según le dijo un familiar suyo a la fuente citada por el rotativo, que añadió que el depuesto líder presenta una "salud mental cuestionable".
"Udai lleva a cabo esas negociaciones con intermediarios", agregó el periódico. "Pero las autoridades estadounidenses no parecen especialmente interesadas en llegar a un trato con él porque presumen que, tarde o temprano, Udai será capturado", aseguraron las fuentes citadas por el diario.
Udai era el jefe de los "Fedayines de Saddam", milicia que formaba parte de las fuerzas de defensa, y también presidía el Comité Olímpico de Irak y la Unión de Periodistas, en su condiciones de editor del diario Babel, que era el de mayor tirada del país.
Su nombre figura en el tercer lugar, después de su padre y su hermano Qusai, en una lista de 55 ex jerarcas de Irak buscados por las fuerzas anglo-estadounidenses que invadieron Irak.
Según The Wall Street Journal, Udai teme que los iraquíes, que durante décadas vivieron bajo el régimen de su padre, lo maten si lo encuentran, y un informante dijo al diario que el primogénito de Sadam Husein prefiere "la seguridad de una prisión estadounidense".
"Udai cambia a menudo de opinión acerca de entregarse", agregó. Pero la fuente dijo que "no tiene más opciones", agregó el diario.
En el caso de los ex jerarcas iraquíes que se han entregado a las fuerzas anglo-estadounidenses, al parecer no se les ha dado garantía alguna acerca de procesamientos y sentencias.
En algunos casos, señaló The Wall Street Journal, las fuerzas invasoras "han ofrecido protección a miembros de la familia de los detenidos, que temen represalias de individuos leales a Sadam, y a algunos familiares se les ha ofrecido ayuda para irse de Irak".