AMMAN/EL CAIRO.- Un periodista japonés que se llevó una granada de Irak como "souvenir", según dijo, fue condenado hoy por un tribunal jordano a 18 meses de prisión por homicidio culposo.
A comienzos de mayo, el explosivo fue hallado durante una revisión de su equipaje en el aeropuerto de Amman. La granada explotó matando al empleado de seguridad que abrió la maleta, mientras que otros tres resultaron heridos, y también el periodista sufrió lesiones menores.
En el proceso, el reportero gráfico que tras concluir la guerra en Irak se llevó la granada como "souvenir", afirmó que era inocente al decir que no sabía que la granada aún podía explotar.