BUENOS AIRES.- Tras 16 meses de inflación provocada por la devaluación del peso desde enero de 2002, Argentina podría registrar en mayo cero inflación o incluso deflación, según revelaron fuentes oficiales al diario "La Nación".
El indicador de inflación del mes pasado se ubicó en "cero o con un número levemente negativo", indicaron fuentes del Palacio de Hacienda.
Las autoridades económicas intentaron no obstante relativizar el impacto del regreso a la deflación, efecto que ya había afectado a los índices de precios minoristas desde 1999 como consecuencia de la recesión económica.
En 1999, el indicador de precios al consumidor concluyó con una deflación del 1,8 por ciento. En 2000, el retroceso fue del 0,7 por ciento y en 2001, del 1,5 por ciento. En cambio, en 2002, tras la devaluación, la inflación llegó al 41 por ciento, mientras en lo que va de este año se acumuló un 2,5 por ciento.
El presidente del Banco Central (BCRA, emisor), Alfonso Prat-Gay, advirtió la semana pasada durante una disertación privada que "desde el punto de vista de la política monetaria, un índice negativo de inflación es mala noticia, así como un índice muy alto de inflación es mala noticia también".
Fuentes del Palacio de Hacienda consideraron por su parte que el eventual retroceso que sufriría el índice de precios al consumidor en mayo "no es preocupante" y se trata de un "dato aislado".
En el Ministerio de Economía explican que el efecto es consecuencia de la tendencia convergente con los precios mayoristas, que no debe confundirse con la deflación producida por la recesión, según señala el matutino.
El economista Guillermo Mondino, ex funcionario durante la gestión de Domingo Cavallo en Economía, estimó que "la Argentina tiene un fenómeno de baja inflación por la apreciación cambiaria". El analista advirtió no obstante las consecuencias que acarrearía que el Banco Central mantenga una política monetaria expansiva, porque podría generar un proceso inflacionario.
"Es peligroso que el Banco Central busque una cierta suba de la inflación para acelerar el nivel de actividad, licuar las tasas de interés y el ajuste fiscal", señaló Mondino.