LIMA.- El secretario general del sindicato de docentes de Perú, Nílver López, dijo este miércoles que firmó un acta de acuerdos con el gobierno que virtualmente anticipa el fin de la huelga nacional magisterial iniciada hace cuatro semanas.
El fin de la huelga será votado este sábado en asamblea del Sutep luego de ser informada sobre los puntos concordados, dijo López a la prensa.
Con esta decisión se allana el camino para el levantamiento del estado de emergencia nacional, decretado por el gobierno la semana pasada ante la ola de huelgas en solidaridad con los docentes.
Suscribieron el acta el primer ministro, Luis Solari, el ministro de Educación, Gerardo Ayzanoa, y monseñor Luis Bambarén, quien ofició de enlace entre las partes en conflicto.
No se dieron a conocer detalles del documento convenido, pero la oferta económica del gobierno se mantuvo en 100 soles (28 dólares) mensuales.
Solari dijo que también las partes firmaron un escrito que compromete al gobierno en lograr al 28 de julio del 2006 la duplicación de los haberes de los profesores respecto a julio del 2001, como fue el compromiso electoral del hoy Presidente Alejandro Toledo.
El primer ministro dijo que al acta central se agregó una cláusula por la cual los firmantes "expresan su conformidad con el texto anunciado y declaran su compromiso de vigencia apenas el Sutep dé por terminado la huelga".
Se crea además una comisión veedora del cumplimiento de los acuerdos que integrarán el ministerio de Educación, el Sutep, los padres del alumnado, la Conferencia Episcopal Peruana y una oficina de educadores.
Solari y López puntualizaron que han quedado algunos puntos sin acuerdo, a los que no se han llegado por incapacidad del presupuesto público.
El dirigente gremial agradeció y reconoció la participación de Bambarén, y dijo que el pacto concluido hoy involucra el compromiso de los maestros de elevar la calidad educativa.
Dijo que con esto "el Poder Ejecutivo ha cumplido su gestión, y ahora queda por cumplir al Congreso de la República", en cuanto a la aprobación de una nueva ley a favor del profesorado.
Con esta decisión se allana el camino para el levantamiento del estado de emergencia nacional, decretado por el gobierno la semana pasada ante las manifestaciones de gremios laborales en apoyo a la causa magisterial, y en cuya resistencia murió un estudiante, decenas quedaron heridos y otros detenidos.
"Creían que no podía heber solución, pero Dios es nuestro aliado y nos ha iluminado con la apertura lograda en la mesa de concertacion", dijo Bambarén, obispo de Chimbote, que empezó hace dos días sus tratativas con la dirigencia del Sutep, a la que hoy elogió "por su gran madurez para plasmar los acuerdos a los que se ha llegado".