NACIONES UNIDAS.— Los inspectores de armas de las Naciones Unidas están listos para volver a Irak a buscar pistas sobre los programas de armamento prohibido, declaró su jefe Hans Blix, sin embargo Estados Unidos no quiere que participen.
Blix, que se retirará después de que finalice su contrato el 30 de junio, presentará el jueves su informe final al Consejo de Seguridad y es casi seguro que se plantee el asunto de futuras inspecciones de la ONU, especialmente después de que los equipos encabezados por Estados Unidos no han encontrado armas ilegales al visitar más de 230 sitios durante las últimas 11 semanas.
El fracaso de los equipos estadounidenses en encontrar armas nucleares, químicas o biológicas se ha convertido en un asunto controversial en Washington, Londres y otras capitales internacionales, pues la presunta posesión de armas prohibidas por parte de Saddam Hussein fue la principal justificación de Estados Unidos y Gran Bretaña para invadir Irak.
En su reporte presentado ante el Consejo el lunes, Blix dijo que sus equipos no encontraron evidencia de que Irak tenía armas químicas o biológicas durante tres meses y medio de inspecciones, pero aún tenían muchas preguntas y pistas que investigar cuando su búsqueda fue suspendida justo antes de que Estados Unidos atacara en marzo.