ROMA.- El Parlamento italiano aprobó hoy una polémica normativa que obligará a paralizar el juicio por corrupción contra el Primer Ministro, Silvio Berlusconi, y cualquier otro proceso en que pueda verse inmerso durante su mandato.
Con los votos de la mayoría gubernamental y la deserción de la oposición, que abandonó el hemiciclo, la Cámara de Diputados dio vía libre a una iniciativa ya sancionada por el Senado y concebida para suspender las causas judiciales contra los altos funcionarios del Estado.
Esta inmunidad entrará en vigor de forma inmediata, de tal manera que Berlusconi se verá liberado del juicio que se le sigue en Milán por presunto soborno de jueces y de su correspondiente sentencia, cuando se dispone a ser el Presidente de turno de la Unión Europea.
No obstante, la oposición considera que quedan abiertas las puertas para su "condena moral", ya que la nueva normativa no es aplicable a los otros imputados, contra los que sigue la causa en Milán, donde la fiscal ha presentado ya sus conclusiones y sus peticiones de pena.
En concreto, para el ex abogado del Primer Ministro Cesare Previti solicitan 11 años de prisión por hacer de intermediario entre Berlusconi y los jueces presuntamente corruptos para que bloquearan, en 1985, la venta de la sociedad alimentaria pública SME al empresario De Benedetti.
Previti, que en la actualidad es parlamentario de Forza Italia, ya fue condenado recientemente a 11 años por un caso similar, del que fue exonerado el líder conservador por prescripción del delito.
La enmienda aprobada hoy, contrariamente a lo que pretendía inicialmente la mayoría gubernamental, suspende sólo las actuaciones penales, pero no las investigaciones judiciales.
El texto, incluido en un proyecto de ley de actualización del artículo 68 de la Constitución, señala que no pueden ser sometidos a procesos penales el presidente de la República, el del Gobierno, los de las dos Cámaras del Parlamento y el del Tribunal Constitucional.
"Desde su entrada en vigor -precisa- se suspenden los procesos en curso en cualquier fase, estado o grado, por cualquier delito, incluidos aquellos hechos previos a la asunción del cargo o de la función, hasta el término de los mismos".
La oposición de centroizquierda abandonó el hemiciclo antes de que se procediera a la votación final, jaleados por centenares de manifestantes del movimiento asambleario que, encabeza el cineasta Nanni Moretti, concentrados en actitud de protesta ante la Cámara de Diputados.
Tanto el Partido de los Comunistas Italianos, como los Verdes y el ex fiscal de Manos Limpias Antonio Di Pietro ya han anunciado que promoverán un referéndum para derogar una ley que consideran "vergonzosa".
Desde algún sector se ha llegado a apuntar incluso la posible inconstitucionalidad de la iniciativa, que se tramitó por vía de urgencia, en lugar de como una reforma de la Carta Magna, lo que hubiera alargado los procedimientos y los plazos.
Piero Fasino, líder de los Demócratas de Izquierda (DS), el principal partido de El Olivo, dijo que era una ley hecha a la medida y que con ella "se pretende tutelar sólo a Berlusconi".
Todos los dirigentes de la alianza gubernamental insistieron en que el único beneficiario es el interés general del país, al tiempo que recordaron que la norma sancionada hoy fue en su día propuesta por un ministro y hoy senador de la oposición, Antonio Maccanico.
Silvio Berlusconi compareció ayer, martes, por segunda y última vez ante el Tribunal que le juzga en Milán, al que acusa de perseguirle injustamente, y dijo que contra él se habían arrojado, sin pruebas "siete años de fango".