RÍO DE JANEIRO.- El Presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, mantiene un respaldo de 42 por ciento entre sus compatriotas, cuando cumple seis meses en el poder y no se aprecian grandes cambios, reveló una encuesta difundida hoy.
Según la investigación de la empresa Datafolha, difundida por el site de internet del diario Folha de Sao Paulo, Lula mantiene más o menos la misma popularidad que tenía hace tres meses, cuando cumplió 100 días en el gobierno con una aprobación de 43 por ciento.
El porcentaje de los que consideraron su administración como regular, subió de 40 a 43 por ciento y quienes los califican como malo pasó de 10 a 11 por ciento.
Lula ganó la presidencia con un respaldo total de casi 70 por ciento, montado en la ola del descontento de los brasileños contra ochos años de gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1994-2002).
Ahora conserva un margen de apoyo similar al que tenía su predecesor cuando cumplió seis meses de su primer mandato y registraba el 40 por ciento de respaldo.
La nota de evaluación sobre el gobierno de Lula se redujo desde 6,5 a 6,0 puntos sobre 10, respecto a la muestra anterior.
La encuesta fue realizada entre 2.630 personas, en 152 municipios de todo Brasil.
En el área económica, principal dolor de cabeza de Lula, ha crecido la percepción de que el gobierno es una continuidad de la línea adoptada por Cardoso.
Durante la campaña electoral, Lula solía denunciar el contenido "usurero, neoliberal y monetarista" de la política económica brasileña, a la que culpaba de haber fomentado el desempleo y el estancamiento de la economía.
Analistas económicos coinciden en que Brasil está atado a estas medidas monetaristas de altos intereses, dada su alta dependencia a capitales internacionales y al Fondo Monetario Internacional.
Los principales problemas de los brasileños siguen siendo el desempleo, la inseguridad, la falta de educación y el transporte.
El 50 por ciento de lo encuestados consideró que el gobierno de Lula es mejor que el de Cardoso; el 13 por ciento lo considera peor y para el 31 por ciento es la misma cosa.
En este escenario, el porcentaje de brasileños que creen que la gestión de Lula será óptima o buena pasó desde 76 a 73 por ciento, respecto a la última muestra.