CIUDAD DE GAZA, Franja de Gaza.- Comandantes israelíes y palestinos se estrecharon la mano el lunes, y el tráfico vehicular empezó a circular en la Franja de Gaza luego de 33 meses de combates sangrientos. Con todo, en medio del proceso de pacificación, milicianos mataron a tiros a un hombre.
En cumplimiento con el plan de paz apoyado por Estados Unidos, Israel retiró tropas del norte de Gaza durante la noche y aceptó retirarse del poblado cisjordano de Belén el miércoles. Y en otra manifestación de los planes para poner fin a la violencia, los primeros ministros de las partes en conflicto, el israelí Ariel Sharon y Mahmoud Abbas, de la Autoridad Palestina, preveían reunirse el martes en Jerusalén, dijeron fuentes palestinas.
Varias milicias palestinas anunciaron la suspensión de los ataques contra israelíes el domingo. Pero el primer día de la tregua se vio afectado por el asesinato de un conductor de camión de origen búlgaro, Christo Radkov, de 46 años.
La Brigada de Mártires Al Aksa, una milicia afiliada con el movimiento Fatah del dirigente palestino Yaser Arafat, se declaró responsable del ataque.
Tres horas después, palestinos dispararon contra trabajadores que construyen la valla de seguridad cerca de la población cisjordana de Qalqiliya, dijo el ejército. Nadie resultó herido.
Colonos israelíes pidieron que el gobierno detenga los gestos de buena voluntad para con los palestinos, pero Sharon les aconsejó paciencia e hizo notar que el proceso había comenzado apenas un día antes.
"Incluso si los palestinos fueran los más rápidos del mundo y los más resueltos, ustedes no pueden esperar que destruyan el terrorismo en un momento... desde esta mañana", dijo Sharon a miembros del parlamento.
Incluso antes del atentado, ambas partes tenían dudas sobre la durabilidad del cese al fuego, dados los fracasos de intentos anteriores. Además, se prevé que la exigencia israelí de que la Autoridad Palestina disuelva a los grupos militantes provocará disputas.
Sin embargo, también reinaba cierto optimismo, manifestado cuando las tropas israelíes salieron de Beit Hanoun, población que vio la mayor parte de sus tierras agrícolas arrasadas por las apisonadoras israelíes.
"Llegaron tarde. Pero, Dios mediante, podremos traer de regreso los viejos tiempos a este poblado", dijo Mohammed Shabat, de 65 años, señalándoles la destrucción dejada por los israelíes a policías palestinos, que tomaron las posiciones que ellos dejaron.
"Este es un paso muy importante y serio emprendido por el lado israelí para la implementación del plan de paz", dijo el ministro de Información palestino Nabil Amr. Su colega de la cartera de Relaciones Exteriores, Nabil Shaath, dijo que Israel debería retirarse de todas las poblaciones cisjordanas en seis semanas. "Las cosas son promisorias y debemos de aprovechar este momento", dijo.