BAGDAD.- Estados Unidos anunciará este jueves una recompensa de hasta 25 millones de dólares a los iraquíes que den información que permita el arresto y enjuiciamiento del ex presidente Saddam Hussein, dijeron altos funcionarios estadounidenses.
Además, se darán hasta 15 millones de dólares por similar información que permita el arresto y condena de alguno de los dos hijos de Saddam Hussein, Uday o Qusay, dijeron a la AFP los funcionarios, que solicitaron el anonimato.
Las recompensas, que serán ofrecidas por el Departamento de Estado dentro de su programa "Rewards for Justice" (Recompensas por la Justicia), serán anunciadas en unas horas por el administrador civil parar Irak, Paul Bremer, en una conferencia de prensa desde Bagdad, precisaron las fuentes.
"Para alentar a los ciudadanos a presentarse y dar tal información el gobierno de Estados Unidos ofrece pagar hasta 25 millones de dólares por el arresto y condena de Saddam Hussein y hasta 15 millones de dólares por el arresto de cada uno de sus hijos", dijo un alto funcionario.
"En ausencia de pruebas concluyentes de que esos individuos están muertos tenemos que hacer planes alternativos para su arresto", afirmó otro responsable.
La recompensa por Saddam Hussein es del mismo monto que la ofrecida por la captura de Osama bin Laden, acusado de dirigir los atentados del 11 de setiembre de 2001 en Estados Unidos.
El domingo, Bremer dijo que las posibilidades de detener al ex presidente iraquí son "muy altas" y será "capturado vivo o muerto".
"Pienso que es importante que lo hagamos, que lo capturemos o lo matemos", agregó.
"No hay ninguna duda de que el hecho de que no hayamos sido capaces de mostrar su rostro permite a residuos del régimen pasearse por los bazares, los pueblos y las ciudades diciendo 'Saddam regresará y nosotros regresaremos, o sea que no cooperen con la coalición'" británico-estadounidense, agregó.
El sábado, un alto responsable estadounidense en Irak que pidió no ser identificado declaró que el ejército estadounidense detuvo a más de 900 leales al régimen derrocado que trataban de "torpedear" los esfuerzos estadounidenses para reconstruir Irak.