WASHINGTON.- El Presidente George W. Bush recibe duras críticas en casa por lo que sus opositores demócratas califican de "retórica machista", invitando a sus enemigos en Irak a lanzar más ataques contra los soldados estadounidenses, que ya sufren bajas diarias.
"Tengo un mensaje para el Presidente: basta de charla, de retórica machista", dijo el congresista Richard Gephardt, ex líder de la minoría en la Cámara de Representantes y uno de los nueve precandidatos presidenciales.
La tempestad estalló a causa de los comentarios realizados por el Presidente el miércoles, cuando trató de tranquilizar a una opinión pública crecientemente preocupada por la resistencia que enfrentan las fuerzas lideradas por Estados Unidos en Irak.
Por lo menos 26 militares estadounidenses han muerto y decenas fueron heridos desde el 1º de mayo, cuando Bush protagonizó un triunfante show mediático al descender de un helicóptero en el portaaviones Abraham Lincoln que volvía del Golfo y declaró el fin de los combates más importantes en Irak.
Los constantes ataques han incrementado los temores de que Estados Unidos se esté empantanando en una prolongada guerra de imprevisibles consecuencias a largo plazo.
"Hay algunos que piensan que las condiciones son tales que nos pueden atacar allá", dijo Bush en un intento por despejar esas preocupaciones. "Mi respuesta es que vengan".
Lo que vino fue una andanada de duras críticas por parte de congresistas demócratas, que en los últimos dos días acusaron al presidente de desafiar irresponsablemente a las fuerzas anti-estadounidenses en Irak y poner en peligro a sus soldados.
El senador Bob Graham, rival de Gephardt por la nominación demócrata a la elección presidencial, no tardó en sumarse a las críticas.
"’Que vengan’ puede ser apropiado que lo diga un árbitro en un match de boxeo en Las Vegas, pero no para el hombre en quien confiamos para liderar a nuestros hombres y mujeres que están en peligro", declaró el veterano legislador.
Para John Kerry, otro presidenciable demócrata, las declaraciones de Bush fueron "imprudentes". El senador de Massachusetts afirmó que desearía ver al Presidente mostrar "menos jactancia y más conciencia y dotes de estadista".
El senador Frank Lautenberg dijo que las declaraciones de Bush fueron irresponsables y provocadoras.
"Sacudo la cabeza con descreimiento", admitió el congresista de 79 años. "Cuando serví en el ejército en Europa durante la segunda Guerra Mundial, nunca escuché a ningún comandante -y menos al comandante en jefe- invitar a nuestros enemigos a atacar a las tropas estadounidenses".
Pero las airadas respuestas a los comentarios de Bush llegaron desde mucho más lejos que el Capitolio.
Jo Anne Miller, de Tacoma, Washington (noroeste), que se identificó como la esposa de un soldado, envió un correo electrónico a la cadena de televisión CNN, diciendo que las declaraciones del presidente eran una invitación a los iraquíes a aumentar los ataques a los hombres y mujeres estadounidenses en uniforme.
"Una vez más Bush prueba lo insensible que realmente es", dijo Miller.