LOS ANGELES.- Al menos ocho personas murieron y 31 más resultaron heridas (14 en estado crítico) después de que un automóvil arremetió a alta velocidad contra un mercado callejero de frutas y verduras en el estado de California.
El incidente tuvo lugar en la localidad costera de Santa Mónica, al oeste de la ciudad de Los Angeles y junto a la playa, en un mercado callejero que todas las semanas atrae a unas 9.000 personas.
Aunque las cifras van cambiando con rapidez, los últimos datos ofrecidos por la policía confirman la muerte de ocho personas y el número de heridos en 31, de los cuales 14 parecen encontrarse en estado crítico.
"Había gente volando por todos los lados", declaró otro testigo de esta catástrofe que ha bloqueado el tráfico en la zona.
El jefe de policía de Santa Mónica, James Butts, dijo que se trata de la escena "más devastadora" que ha presenciado en 30 años en el departamento, pero evitó especular sobre las causas del atropello masivo.
De acuerdo con las fuentes policiales, la policía ha detenido al conductor del vehículo, que según testigos oculares era un hombre mayor de unos 70 años y llevaba un bastón.
Por el momento se han dado muchas teorías de este incidente, desde la posibilidad de que haya sido premeditado hasta que el conductor estuviera ebrio.
Algunos testigos también han indicado que el sospechoso no sufría heridas cuando fue detenido mientras que otros aseguran que había sufrido un ataque al corazón mientras conducía.
Ninguna de estas posibilidades ha sido confirmada por la policía, que por el momento está preocupada por atender a las víctimas en un área que muestra la devastación dejada por este vehículo a su paso por las dos manzanas que ocupaba el mercado.
Aunque según los testigos presenciales todo ocurrió en breves segundos, sus efectos han sido devastadores en este mercado callejero, muy popular y que todas las semanas convierte el área en peatonal para que los granjeros locales puedan ofrecer sus productos directamente al consumidor.
El automóvil, de color rojo, tiene las huellas de los destrozos realizados tanto en su parte de delante, la trasera y el techo, donde se podía ver no sólo restos de frutas sino algún zapato de las víctimas.
"El automóvil se metió en la zona a tal velocidad que sorprendió a todos", declaró a la prensa Nina Arvesen, residente de la zona.
