EMOLTV

UE reiterará condena a Cuba y confirmará sanciones

Los cancilleres de los Quince evaluarán su posición común y, al mismo tiempo, aprobarán un texto de conclusiones en el que subrayarán que, desde la última evaluación el pasado mes de diciembre, "no sólo no ha habido pasos positivos", sino que la situación de los DD.HH. se ha deteriorado.

20 de Julio de 2003 | 12:33 | EFE
BRUSELAS.- La UE aprobará mañana un nuevo texto de condena a Cuba por el deterioro de los derechos humanos, además de ratificar las sanciones contra ese país y dejar abierto el diálogo político a la espera de un cambio de actitud de su Gobierno.

Los ministros de Exteriores de los Quince evaluarán su Posición Común con respecto a la isla sin introducir ningún cambio en la misma y, al mismo tiempo, aprobarán un texto de conclusiones en el que subrayarán que, desde la última evaluación el pasado mes de diciembre, "no sólo no ha habido pasos positivos" sino que la situación de los derechos humanos se ha deteriorado de forma severa.

El documento, en el que se hace un preciso balance de lo ocurrido en Cuba desde comienzos de año, se aprobará como punto "A" del orden del día de la reunión, es decir, sin necesidad de discusión.

"Las autoridades cubanas violaron los estándares internacionales de los derechos humanos con detenciones a gran escala de disidentes, seguidas de procesos judiciales sumarios y arbitrarios", precisa el texto.

En abril pasado, prosigue el documento, "se realizaron juicios sumarios y ejecuciones rápidas de tres secuestradores, violando las más mínimas normas internacionales para la aplicación de la pena de muerte".

La UE se mostrará "profundamente preocupada porque las autoridades cubanas han vuelto a aplicar la pena de muerte" y esperará que se reanuden de facto la moratoria de esta práctica.

Asimismo, reiterará su llamamiento a los responsables cubanos para que "liberen a los presos políticos inmediatamente" y para que, mientras tanto, "(los presos) no sufran excesivamente y no sean expuestos a un trato inhumano".

Los ministros mencionarán también las "manifestaciones masivas oficiales dirigidas por el presidente (Fidel) Castro contra dos embajadas de Estados miembros en La Habana", en alusión a las legaciones española e italiana en la capital cubana.

Las protestas se vieron acompañadas por los medios de comunicación estatales cubanos que "condujeron una campaña inaceptable de vilipendio personal contra ciertos jefes de Gobierno de Estados miembros de la UE", en concreto, contra el español José María Aznar y el italiano Silvio Berlusconi, según del documento.

La UE lamentará en las mismas conclusiones "la falta de reformas económicas y la ausencia de libertad económica que hacen la vida diaria de los ciudadanos cubanos más dura".

Por ello, señalará que "espera una nueva actitud para parte de las autoridades cubanas y mayor esfuerzos de reforma" y decidirá mantener, porque "sigue siendo válida", su posición común con respecto a la isla, en la que la UE condiciona el futuro de su cooperación a la apertura democrática del régimen de Castro.

También mantendrá el "compromiso constructivo" como base de la política de cooperación europea con respecto a Cuba, y el diálogo político como vía para ayudar a que se produzcan "resultados tangibles".

No obstante, en el ámbito de la cooperación, los Quince afirmarán que la financiación debería canalizarse a través de instituciones gubernamentales "sólo si se garantiza un beneficio directo para la población o una contribución significativa al desarrollo sostenible en Cuba".

La UE plasmará además su disposición a "impulsar el refuerzo de la cooperación al desarrollo en Cuba para promover la transición hacia la democracia pluralista y el respeto de los derechos humanos, así como para mejorar el nivel de vida de la población cubana".

En las conclusiones, los ministros no harán referencia a la posibilidad de ir más allá en el ámbito de sanciones, sino que reiterarán las medidas políticas y diplomáticas adoptadas contra Cuba el pasado 5 de junio, como la de limitar las visitas gubernamentales de alto nivel o la de invitar a disidentes a las fiestas nacionales en las embajadas europeas en la capital de la isla.

Esta última, una de las que más polémica ha suscitado, debería aplicarse mañana mismo en La Habana con motivo de la fiesta nacional belga, coincidiendo con la reunión de los ministros en Bruselas.

Francia la puso en práctica el pasado lunes para celebrar el 14 de julio, al invitar a los principales disidentes cubanos a la recepción ofrecida por el embajador francés en la capital cubana.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?