SINGAPUR.- Las siamesas surcoreanas Sa Ran (amor) y Ji Hye (sabiduría) fueron separadas con éxito hoy, tras cuatro meses de vida unidas por la parte baja de la espina dorsal, en el hospital privado Raffles de Singapur.
El portavoz del centro sanitario, el médico Prem Kumar, anunció en una rueda de prensa que la separación se produjo a las 14:40 hora local (6:40 GMT), una hora y cuarenta minutos después del comienzo de la intervención.
Kumar manifestó que ahora trabajaban en el proceso de reconstrucción y cirugía plástica.
Las niñas pasarán una semana en cuidados intensivos antes de ser trasladadas a otro departamento e iniciar el proceso de rehabilitación para garantizar que puedan moverse con normalidad.
Kumar advirtió que se trata de la primera vez que se separa a siamesas unidas por la pelvis y que la intervención puso de manifiesto que las niñas también compartían ciertos órganos internos de la zona del colon rectal y genital.
La separación de estos órganos, según los expertos, aunque ha complicado el trabajo de los cirujanos, no resultará en la infertilidad de las niñas.
Durante la misma rueda de prensa, se anunció que tanto la dirección del Raffles como el equipo médico habían decidido no cobrar por la operación, cuyo coste se calculaba en unos 29.000 dólares.
Este hospital es el mismo en el que apenas hace dos semanas fallecieron las siamesas iraníes de 29 años Ladan y Laleh Bijani, que estaban unidas por el cráneo.
Ladan y Laleh fallecieron desangradas en la mesa de operaciones a las cincuenta horas del comienzo de la operación y justo después de que los cirujanos hubiesen completado la separación de los dos cerebros, que estaban unidos en un treinta por ciento y que compartían la misma arteria para el riego sanguíneo.
A pesar del fracaso con las Bijani, el coraje de éstas influyó en los padres de Amor y Sabiduría y les dio el valor para continuar adelante con una intervención, en la que sólo habían recibido un 85 por ciento de posibilidades de éxito.
Min Seung Joon y su esposa, Chang Yoon Kyung, se trasladaron a Singapur con sus hijas en junio para someterlas a las primeras pruebas, tras conocer el proyecto en el que se había embarcado el Hospital Raffles y el neurocirujano Keith Goh con las siamesas iraníes.
"Las hermanas Bijani nos dieron coraje a nosotros y a nuestros bebés", declaró Min a la prensa surcoreana tras conocer la historia de las dos iraníes.
Ladan y Laleh llevaban años tratando de ser separadas y en 1996 ya lo intentaron en Alemania, pero los especialistas a los que acudieron descartaron la operación debido al alto riesgo.
El éxito del neurocirujano Goh en 2001 con dos siamesas nepalíes de once meses unidas por la cabeza llevó a las iraníes a recurrir a él y después de meses de análisis y exámenes se autorizó la intervención.
Los padres de Sa Ran y Ji Hye tenían también el problema de financiar la operación, por lo que Min, de 25 años, vendió su negocio, un cibercafé, en Corea del Sur y volvió con su esposa e hijas a Singapur.
"Sólo quiero ver a mis hijas crecer e ir a la escuela", declaró Min a la prensa, lo que sería difícil si permanecían unidas.
Los especialistas le habían advertido de que por la forma en que estaban unidas tendrían dificultades para andar o mantenerse en pie cuando creciesen, e incluso para permanecer sentadas.
El equipo médico que separó hoy a las niñas coreanas está formado por especialistas en ortopedia, pediatría, neurocirugía y cirugía plástica.
Las hermanas Amor y Sabiduría nacieron el 3 de marzo pasado en Corea del Sur unidas por la parte baja de la espina dorsal, por lo que nunca se habían visto de frente y sólo podían yacer tumbadas sobre un lado.