HONG KONG.- El Primer Ministro británico, Tony Blair, dijo este miércoles que la muerte de los hijos del derrocado Presidente Saddam Hussein, Uday y Qusay, durante una feroz batalla con tropas estadounidenses, constituye "un gran día para el nuevo Irak".
"Estos dos hombres, en particular, pertenecían a la alta dirigencia del régimen que no sólo era una amenaza por su programa de armas, sino que también era responsable de la tortura y asesinato de miles y miles de iraquíes inocentes", dijo Blair a periodistas durante su visita a Hong Kong.
La muerte de los hijos de Hussein constituye un estímulo para Blair y para el Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, porque podría disminuir la resistencia armada en Irak y desviar la atención de la polémica de si ambos líderes exageraron los informes sobre los supuestos programas de Bagdad para construir armas de destrucción masiva, dijeron analistas.
Por otra parte, Blair recortará su estadía en Hong Kong debido a la amenaza de uno de los tifones más poderosos que se ha aproximado a las costas de China en los últimos años.
Aunque su regreso a Gran Bretaña estaba previsto para el jueves, Blair volará el miércoles a Londres, según un portavoz.
Blair se reunió en la mañana del miércoles con el máximo ejecutivo de Hong Kong, Tung Chee-hwa, y varios de sus ministros principales para conversar, según se había previsto, sobre la crisis política en el territorio chino, que se vio convulsionado el mes pasado por manifestaciones antigubernamentales.
La gira de Blair, que incluyó a China territorial, Japón y Corea del Sur, ha sido opacada por el suicidio de un experto en defensa de Gran Bretaña que estremeció los pilares de su gobierno y provocó que algunos exigieran su dimisión.