BUENOS AIRES.- Dos de los 46 ex represores argentinos buscados por la justicia trasandina, a pedido del juez español Baltasar Garzón, se entregaron hoy, mientras que otro intentó suicidarse con un tiro en la boca, dijeron fuentes judiciales, policiales y hospitalarias.
Los 45 militares y el civil que busca Garzón están acusados de cometer delitos contra ciudadanos españoles durante la dictadura que gobernó Argentina entre 1976 y 1983.
Según distintas denuncias de familiares de las víctimas, durante esos años desaparecieron entre 10.000 y 30.000 disidentes.
Tras darse a conocer la lista enviada por Garzón a su par argentino Rodolfo Canicoba Corral, el suboficial de Prefectura Naval Juan Antonio Azic intentó suicidarse en un bar de Buenos Aires disparándose un tiro en la boca, dijo una fuente policial.
Azic, quien buscó quitarse la vida con una pistola 9 milímetros, fue trasladado al Hospital Naval.
El primer parte médico aseguró que "el estado actual (de Azic) es estable, con sangrado controlado y el pronóstico es reservado".
En tanto, el abogado Gonzalo Torres de Tolosa (el único civil de la lista de 46 ex represores buscados) y el policía aeronáutico Ernesto Weber se entregaron a la justicia, informó una fuente del juzgado de Canicoba Corral.
Canicoba Corral recibió el jueves el pedido de "arresto preventivo con fines de extradición" de los ex represores.
Tras cada arresto, comienza a correr un plazo de 30 días para que Garzón envíe el pedido formal de extradición.
Aún está vigente un decreto del ex presidente Fernando de la Rúa que rechaza automáticamente los pedidos de extradición por delitos cometidos en el país, aunque el actual presidente Néstor Kirchner ha dado señales de que planea derogarlo.
Diversos medios argentinos aseveraron el viernes que otro de los integrantes de la lista, el ex capitán de fragata Alfredo Astiz -condenado a cadena perpetua en ausencia en Francia por la muerte de dos monjas francesas- habría dejado el país hace varias semanas, sin embargo esa versión no pudo ser confirmada.
