EL CAIRO.- El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, considera que Estados Unidos "hizo algo bueno" liquidando a Uday y a Qusay, los hijos del presidente derrocado iraquí Saddam Hussein, en una entrevista publicada hoy en el diario árabe Al Hayat.
"Deshacerse de ellos es algo bueno", afirmó Powell, estimando que "mientras estaban vivos, la visión del futuro de Irak era incierta".
"Lo mismo sucede con Saddam Hussein, que sigue vivo", consideró.
"Los dos hijos de Saddam están acabados, y creo que el pueblo iraquí podrá ver en lo sucesivo que el futuro es mejor", dijo.
El gobierno estadounidense publicó hoy las fotografías de los cadáveres ensangrentados de los dos hijos de Saddam Hussein, Uday y Qusay, muertos el martes durante un ataque del ejército estadounidense contra una casa en la que estaban escondidos en Mosul, en el norte de Irak.
"Quizás tenían informaciones que hubieran sido útiles, pero resistieron (...) Nuestros soldados hicieron lo que se suponía que tenían que hacer y respondieron a sus disparos", contestó Powell cuando le preguntaron si no hubiera sido preferible su detención.
"Estos dos hombres eran responsables de la muerte de numerosos iraquíes inocentes y de musulmanes", agregó Powell.
Por otra parte, el secretario de Estado norteamericano afirmó que "cada vez más iraquíes se presentaban para dar informaciones" sobre Saddam Hussein "y se daban cuenta de que las dificultades con las que se topaban estaban relacionadas con los ex miembros del partido Baas o con los remanentes del régimen".
"No pararemos hasta que todos ellos desaparezcan, sobre todo Saddam Hussein", dijo.
Powell instó "al mundo árabe a mirar atentamente las fosas comunes repletas de cuerpos de musulmanes que fueron muertos no por Estados Unidos o Gran Bretaña, sino por Saddam Hussein, sus dos hijos y su régimen".
Desde la caída del régimen de Saddam Hussein en abril, se descubrieron miles de cadáveres en las fosas comunes en Irak.