SANTANDER.- Un coche-bomba explotó hoy en el aeropuerto de Santander, en el norte de España, sin producir víctimas, según informaron fuentes de la Guardia Civil.
El coche-bomba estaba situado en el aparcamiento del aeropuerto de esta ciudad y sólo provocó daños en la fachada del terminal y la destrucción de una docena de automóviles.
Estos atentados provocaron un total de 13 heridos de diversa consideración.
El atentado ocurrido en la costa norte del país es el más reciente de una serie de ataques de ETA y podría formar parte de una campaña de verano dirigida a socavar la importante industria turística de España.
El diario vasco Gara recibió una llamada anónima en nombre de ETA alertando de la colocación de un artefacto explosivo.
La explosión dañó la fachada del aeropuerto, rompió ventanas, retorció láminas de metal, destruyó 12 automóviles y causó daños menores a alrededor de otros 40 vehículos, indicaron versiones de prensa.
“Una vez más, ETA...ha tratado de sembrar el terror”, dijo el ministro del Interior, Angel Acebes, a los periodistas tras viajar al aeropuerto de Santander para estudiar los daños.
“ETA está haciendo todo lo que puede, con todo lo que tiene”, agregó.
La explosión se produce tras una semana de renovada actividad atribuida a ETA.
El viernes, un paquete bomba colocado en los Juzgados de Estella, Navarra, causó heridas leves a un joven, mientras en la localidad de Andoáin la explosión de dos artefactos caseros sólo provocó daños materiales.
El pasado martes, dos bombas estallaron en dos hoteles de la costa española, uno en Benidorm y otro en Alicante, causando heridas a 13 personas, dos de ellas de gravedad.