LONDRES.- Un taxista acusó hoy a Euan Blair, de 19 años e hijo mayor del Primer Ministro británico, de provocar este lunes un accidente con su coche y comunicar posteriormente al seguro que no tuvo ninguna responsabilidad en el siniestro.
Simon Hayden, de 58 años y que desde hace 22 es dueño de la empresa Egham Taxis, aseguró que el suceso se produjo cuando el coche que conducía Euan salió de un cruce e invadió la vía por la que él viajaba, a pesar de que debía haberle dado preferencia.
Según su relato, el Ford Focus que conducía Euan Blair, que acaba de sacarse el carné de conducir, y su Ford Mondeo resultaron dañados como consecuencia del accidente, ocurrido en Egham, en Surrey, cerca de Londres.
Hayden aseguró que, aunque en un primer momento Euan se disculpó y aceptó ser el causante del suceso, el seguro acaba de comunicarle que finalmente considera no tener responsabilidad.
"Si quieren pelea, la van a tener", fue el comentario del taxista, que considera que el hecho de que la madre de Euan, Cherie Balir, es una famosa abogada tiene posiblemente algo que ver con el cambio de opinión del muchacho.
El taxista indicó que Euan fue muy amable cuando salió del coche y que, una vez le dijo su nombre, le dijo: "¿Euan Blair? ¿El famoso?".
"Teniendo en cuenta quiénes son sus padres, uno habría pensado que era mejor dejar" el asunto y no denegar su responsabilidad, apuntó Simon Hayden.
Fuentes de la policía de Surrey sólo han señalado que se produjo un pequeño accidente de tráfico sobre las 12.20 GMT del lunes y que los conductores intercambiaron sus datos, sin que nadie resultara herido.
Por su parte, un portavoz de Downing Street se limitó a señalar: "No comentamos cuestiones personales y punto".
Euan Blair, que estudia Historia Antigua en la Universidad de Bristol (suroeste de Inglaterra), ya le ha dado varios quebraderos de cabeza a su famoso padre, que, junto a su esposa, intentan por todos los medios alejar a sus cuatro hijos del acoso de los tabloides.
Pero en julio de 2000 los medios británicos publicaron que Euan fue detenido tras ser encontrado por la policía borracho y tumbado en el suelo de la Plaza Leicester, en el centro de Londres.
El adolescente intentó entonces ocultar su identidad e inicialmente declaró que tenía 18 años, pues la ley británica prohíbe a los menores de edad comprar bebidas alcohólicas.
