COLOMBIA.- La guerrilla colombiana del ELN afirmó que el proceso de paz entre el gobierno de Alvaro Uribe y los paramilitares es una "comedia mal montada", en la que el presidente le está "devolviendo favores" a esos electorales con la lavandería montada como proceso de paz, en la más vergonzante impunidad conocida en el país. Son socios negociando entre los mismos el interés nacional, como si fuera propio", manifestó el ELN en la declaración divulgada en su página de internet.
El grupo guerrillero consideró que "nada tiene el gobierno que negociar con ellos (los paramilitares) salvo el sometimiento a la justicia dentro de un proceso judicial y no dentro de los marcos de un proceso de paz, como inapropiadamente se está haciendo".
El ELN señaló que los comandantes paramilitares Carlos Castaño y Salvatore Mancuso "enriquecidos y con un gran poder acumulado en los negocios sucios, pretenden 'lavarse' cubriéndose con la égida contrainsurgente, para mimetizarse de luchadores políticos".
"Los diálogos con los paramilitares es otro cuento que termina en una comedia mal montada, donde se confunden perversamente los conceptos y los papeles. Ellos (paramilitares) defienden al Estado y no le están haciendo la guerra, ni son un proyecto contrapuesto, entonces ¿sobre qué dialogan?", cuestionó el ELN.
El guevarista Ejército de Liberación Nacional (ELN) se refirió así al acuerdo anunciado el pasado 15 de julio sobre la desmovilización de 13.000 hombres de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), organización ilegal que reúne al 70% de los paramilitares.
Al hacer un balance del primer año de gobierno de Uribe, que se cumplirá el próximo jueves, el ELN señaló que los paramilitares continúan cometiendo crímenes y que se ha profundizado el conflicto armado interno, que lleva más de cuatro décadas.
"La guerra fue el programa de gobierno de Uribe y lo está cumpliendo para satisfacción de quienes cosechan beneficios con la guerra. No estando la paz dentro de sus propósitos inmediatos, resulta lógico que su balance en este primer año esté en cero", subrayó.
En ese sentido, el grupo rebelde reiteró lo que señaló en una entrevista publicada hace tres días su jefe militar Antonio García, quien dijo que el ELN no se arriesgaría en un diálogo porque Uribe "ha montado una estructura de guerra".
El ELN, segunda guerrilla con 4.000 efectivos, anunció a fines de diciembre de 2002 que suspendía los diálogos exploratorios que mantenía con el gobierno de Uribe en Cuba, acusando al mandatario de neoliberal y de haberse aliado con los paramilitares.
Uribe, por su parte, ha cuestionado la voluntad de paz del ELN y también ofreció negociar con la mayor guerrilla del país, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, 17.000 combatientes), pero ha condicionado esa posibilidad a que los rebeldes declaren un cese del fuego y acepten la participación de la ONU.