LA HABANA.- El jefe de Estado cubano Fidel Castro inauguró hoy un moderno Centro Nacional de Genética Médica en las afueras de La Habana, que permitirá a los médicos de la isla diagnosticar y dar tratamiento preventivo a centenares de enfermedades originadas por deficiencias en los genes.
Vestido con su tradicional uniforme de combate verde olivo, Castro presidió las ceremonias de inauguración del centro de investigaciones, que cuenta con un área de laboratorios de 7.000 m2 y que fue dotado con instrumental de última generación.
"En este centro se cumplirán funciones asistenciales, docentes y de investigación, que serán las más importantes en un futuro cercano", señaló el Mandatario ante un auditorio formado por médicos, científicos y más de 200 nuevos graduados con el título de master en asistencia de estudios genéticos.
En un discurso de poco más de hora y media de duración, Castro enfatizó en las bondades del sistema socialista vigente en la isla, "que tiene como objetivo prioritario la justicia social y el bienestar de nuestros ciudadanos".
"Ello ha hecho posible erigir este centro de investigación", que cuenta con tres laboratorios especializados: uno de biología molecular, para trabajar sobre el ADN celular; otro de citogenética, para identificar aberraciones cromosómicas como el síndrome de Down, y un tercero de detección de errores congénitos del metabolismo.
"Se podrán diagnosticar en este centro cientos de patologías de origen genético, y aunque algunas de esas enfermedades no tienen aún una cura efectiva, al lograr un diagnóstico temprano se podrán tomar medidas paliativas y mejorar las condiciones de vida a los pacientes", explicó Castro.
Tras reseñar el moderno instrumental que tendrán a su disposición los genetistas para realizar sus trabajos, el gobernante cubano destacó que "lo más importante que tenemos aquí es el talento de nuestros científicos, fruto de la educación que se brinda en el país".
"Pero eso no serviría de mucho, si no le sumamos el espíritu de solidaridad, de fraternidad entre los hombres y la conciencia" generada en esos especialistas durante los 44 años de revolución socialista en la isla, acotó.
Recordó que Cuba es "un país pequeño y pobre", pero dijo que su sistema político le permitió dotar a su pueblo de este moderno centro médico, único en los países de América Latina, debido a que "aquí la salud no es un negocio, como sí lo es en las sociedades capitalistas".
"En el capitalismo se piensa más en ganar dinero que en sanar realmente a una persona", denunció Castro.
Felicitó a los médicos que recibieron su postgrado en asistencia genética y les recordó que su misión humanitaria es la de perfeccionarse como científicos para "dar mayor calidad de vida a nuestra población y a quien la necesite".