BUENOS AIRES.- McDonald’s volvió a quedar el miércoles en el ojo de la tormenta en Argentina luego de que se descubriera en sus hamburguesas de carne y pollo la presencia de salmonella y escherichia coli, una bacteria que causa el grave Síndrome Urémico Hemolítico.
Los análisis bromatológicos realizados por orden del fiscal Daniel Pavlovsky revelaron la presencia de estas bacterias en muestras tomadas el 11 de julio en un local de la cadena de comidas rápidas en el barrio de Villa del Parque, en la capital argentina.
Por su parte, un portavoz de la Dirección General de Higiene y Seguridad Alimentaria del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dijo a la agencia AP que si bien las muestras tomadas por sus especialistas en el mismo local hasta ahora han arrojado resultados negativos, las investigaciones continúan.
"McDonald’s Argentina nuevamente manifiesta su sorpresa ante la reiterada difusión de información vinculada a los resultados de análisis realizados sobre muestras de carne cruda", dijo la empresa en un comunicado.
"La empresa no comercializa, bajo ningún concepto, carne cruda, al tiempo que los procedimientos de cocción y de seguridad sanitaria garantizan la venta al público de productos seguros... Nuestros procesos aseguran la cocción de la carne a la temperatura necesaria para eliminar cualquier riesgo sanitario", agregó.
Esta no es la primera vez que la cadena de comidas rápidas, líder de ventas en el país, se ve involucrada en este tipo de escándalo.
Meses atrás, la empresa fue denunciada por los padres de dos menores, uno de ellos fallecido, que sufrieron el Síndrome Urémico Hemolítico (S.U.H) -que provoca insuficiencia renal- supuestamente luego de consumir hamburguesas en mal estado en los locales de la cadena.
Posteriormente, la justicia ordenó análisis a hamburguesas crudas en los locales en los que habían consumido los niños que dieron como resultado la presencia de escherichia coli, bacteria productora del S.U.H.
Según informes médicos, esta enfermedad puede ser causada por diversos factores relacionados a la ingesta de alimentos o agua contaminada y afecta principalmente a menores de cinco años.
Para descartar las sospechas de la presencia de esta u otras bacterias, la compañía lanzó a mediados de julio un programa de auditorías diarias por 90 días en sus 200 locales en el país realizadas por autoridades sanitarias.