MADRID.— Unas 5.000 personas marcharon hoy en apoyo de la independencia del País Vasco y del grupo separatista ETA, en la ciudad norteña de San Sebastián.
La jornada se llevó a cabo sin serios incidentes, aunque un grupo de personas quemaron una bandera española y profirieron cánticos pro-etarras.
La marcha se celebró un día después de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, una de las 17 comunidades autónomas de España, levantó la restricción vigente contra la realización de la protesta.
El departamento del Interior vasco había prohibido el evento porque era organizado por el partido Batasuna, que la justicia declaró ilegal hace unos meses. Batasuna es acusado de ser el brazo político del grupo etarra.
El Tribunal dictó su sentencia a favor de la marcha luego de no hallar pruebas que sustentaran la suposición del Gobierno.
La manifestación, encabezada por pancartas con las leyendas "No al Apartheid" y "Autodeterminación", tenía como fin expresar un malestar por lo que algunos ven como la exclusión de movimientos o personas independentistas de la política regional.
"Tenemos el puño cerrado, que nadie piense que va a hacer política en este país apartando a la izquierda abertzale", dijo en su discurso Arnaldo Otegi, ex líder de Batasuna y hoy portavoz del grupo independentista Sozialista Abertzaleak.
Mientras Otegi hablaba se produjo la quema de la bandera, y este alcanzó a decir al disiparse el humo: "¡Qué mal huele la bandera española!".
Estados Unidos y la Unión Europea consideran a ETA como grupo terrorista. En sus 35 años de lucha, ETA ha sido acusada de la muerte de más de 800 personas.
Esta organización busca la independencia de la región vasca en el norte de España y suroeste de Francia.