BAGDAD.- Doscientos detenidos iraquíes, entre ellos prisioneros de guerra, que habían sido encarcelados en el centro de detención de Um Qasr, cerca de la frontera con Kuwait, fueron liberados hoy ante la sede de la coalición estadounidense-británica en Bagdad.
Con el pelo largo, los rostros barburdos y las ropas sucias, los presos llegaron a la capital en cinco autobuses y minutos después de su puesta en libertad se apresuraron en tomar taxis para regresar a sus casas.
"La coalición nos ha liberado. Hemos sido maltratados, no podíamos comer ni beber lo suficiente", afirmó uno de ellos, detenido desde hace tres meses. "Fui arrestado y no había hecho nada", aseguró.
El pasado 4 de agosto, la general Janis Karpinski, comandante del 800º cuerpo de policía militar estadounidense, calculó en 5.000 el número de detenidos por las fuerzas de la coalición. Entre ellos hay, según ella, prisioneros de guerra, detenidos por delitos comunes y por razones de seguridad.