QUITO.- El ex Presidente Gustavo Noboa continuaba esperando hoy un salvoconducto del Gobierno para viajar a República Dominicana, que le concedió asilo político.
El 28 de julio, Noboa solicitó asilo aduciendo que es un perseguido político, tras ser acusado por el ex Mandatario León Febres Cordero, de haber perjudicado por más de 9.000 millones de dólares al estado en una renegociación de la deuda externa.
Desde ese día, Noboa está refugiado en el domicilio del consejero dominicano Juan Belén en un lujoso edificio del norte de Quito, esperando el salvoconducto que le permita salir del país, luego de que el presidente de República Dominicana, Hipólito Mejía, le concediera el asilo el lunes 11 de agosto.
Sin embargo, el Presidente Lucio Gutiérrez, a su arribo el domingo a Ecuador tras asistir a la investidura del nuevo Mandatario de Paraguay, Nicanor Duarte, explicó a la prensa que todavía no decide entregarle el aval a Noboa.
"Estoy esperando que se realice el examen a los instrumentos jurídicos internacionales que se manejan en la cancillería ecuatoriana y que me presentarán en los próximos días, para tomar una decisión final", afirmó.
Noboa, de 66 años, tiene en su contra una orden de detención domiciliaria emitida, el día en que República Dominicana le otorgó el asilo, al haber encontrado culpabilidad en el ex gobernante (2000-2003) por la denuncia de Febres Cordero.
El edificio donde vive el diplomático dominicano está resguardado por una decena de policías que revisan todos los vehículos que ingresan y salen del lugar, para impedir que el ex gobernante salga furtivamente del país.
Varios ex ministros de Noboa, intelectuales, y sacerdotes, han acudido durante los 20 días que lleva el ex presidente en el departamento de Belén, para solidarizarse con él, y han solicitado al gobierno otorgue el salvoconducto.
