MOSCÚ.- El descarrilamiento de un tren de carga ruso que transportaba vehículos militares provocó un nuevo atentado explosivo en Chechenia, este lunes, aunque sin causar víctimas, según informaron fuentes oficiales citadas por la agencia Interfax.
El atentado se produjo cuando el tren estaba a poca distancia de la estación de llegada de Gudermes, en el norte de Chechenia.
La situación en la república sigue tensa, a menos de dos meses de las elecciones presidenciales locales del 5 de octubre, culminación del proceso político con que el Kremlin quiere reafirmar la pertenencia de Chechenia a Rusia.
Los preparativos para la consulta siguen regularmente, según explicó la comisión electoral, precisando que ya fueron invitadas varias delegaciones de observadores internacionales: entre otras las del Consejo de Europa y la Liga Árabe.
Mientras tanto sigue la violencia y los casos de desaparición de civiles (380 personas desde principios del 2003, según el gobierno pro ruso de Grozny).
Según cifras oficiales, sólo en la última semana murieron en emboscadas o tiroteos 12 militares federales y 24 guerrilleros.
Además hoy la fiscalía regional señaló que aumentó a 19 la cantidad de guerrilleros que cedieron las armas, en las últimas semanas, a cambio de la amnistía ofrecida por Moscú.
Las autoridades admiten sin embargo que aún hay entre 2.000 y 3.000 milicianos activos en el terreno, además de los hombres y mujeres que siguen adiestrándose para realizar atentados.