BUENOS AIRES.- El ex Presidente argentino Fernando de la Rúa decidió no presentarse hoy a declarar ante la Justicia y sólo entregó un escrito en la causa en que está imputado por el asesinato de cinco manifestantes, en el marco de la represión policial a las protestas que precedieron a su renuncia en 2001.
El abogado defensor del ex presidente, Zenón Ceballos, informó hoy a la agencia Télam que De la Rúa presentó un escrito con el que "cumplimentó los alcances de la audiencia que él mismo había pedido".
De la Rúa había sido citado por la jueza federal María Servini de Cubría a ampliar la declaración indagatoria del pasado 16 de julio, que había sido solicitada por el mismo ex mandatario.
"Con este escrito (De la Rúa) entiende cumplimentar los alcances de la audiencia que él mismo había solicitado para completar detalles de la indagatoria inicial", señaló el abogado.
En la presentación escrita, el ex presidente "brindó más precisiones respecto a su falta de conocimiento de la gravedad de los hechos registrados hasta entrada la tarde del día 20 de diciembre" del año 2001, precisó el letrado.
El ex Presidente (1999-2001) está imputado por la Justicia de cinco homicidios culposos y lesiones culposas a 227 manifestantes durante la represión policial a las manifestaciones populares contra su gobierno horas antes de su renuncia el 20 de diciembre de 2001, en las inmediaciones de la Casa de Gobierno, la Plaza de Mayo y zonas cercanas en el centro de Buenos Aires.
De la Rúa se presentó de forma imprevista el pasado 16 de julio a prestar declaración indagatoria ante la magistrada, durante la cual negó haber tenido responsabilidad en el asesinato de los manifestantes.
El ex Mandatario aseguró en esa oportunidad que él dispuso "mantener el orden y evitar los excesos", según dijeron sus abogados.
En la causa abierta a raíz del asesinato de cinco manifestantes se encuentran procesados, sin prisión preventiva, el ex secretario de Seguridad Interior Enrique Mathov, el ex jefe de la Policía Federal Rubén Santos y algunos ex jefes de esa fuerza de seguridad.
Durante los saqueos, manifestaciones y protestas que se desataron en todo el país mientras imperaba el Estado de sitio decretado por De la Rúa, el miércoles 19 y el jueves 20 de diciembre de 2001, murieron al menos 31 personas y hubo cientos de heridos.
De la Rúa también está involucrado en una causa judicial que investiga el presunto fraude a ahorristas perjudicados por el "corralito" financiero instaurado a finales de su gobierno y que mantuvo congeladas las cuentas bancarias y restringió el retiro de efectivo.