LONDRES.- El Primer Ministro británico, Tony Blair, aprobó que se revelase que el científico David Kelly era la fuente de una polémica noticia de la BBC sobre Irak, aunque dejó que la estrategia fuese aplicada por el Ministerio de Defensa.
Así se desprende de uno de los numerosos documentos divulgados este fin de semana por el juez James Hutton, hasta un total de 9.000 páginas, que han sido presentados en la investigación que dirige sobre la muerte de Kelly.
Kelly, asesor del Ministerio de Defensa y ex inspector de la ONU, aparentemente se suicidó después de que trascendiera que fue la fuente de una polémica noticia de la BBC sobre Irak.
La cadena pública denunció a finales de mayo que el Gobierno había ’’exagerado’’ un dossier sobre Irak, en el que habría insertado, sin la aprobación de los servicios secretos, la afirmación de que Sadam Husein podía lanzar un ataque letal en 45 minutos.
Entre las pruebas divulgadas figura un memorando de John Scarlett, presidente del Comité de Inteligencia Conjunto encargado de elaborar ese informe, que destaca el ’’acuerdo general’’ en la oficina del Primer Ministro para divulgar el nombre de Kelly.
’’Hay acuerdo en que el asunto se hará público de forma inevitable’’, escribió Scarlett después de una reunión celebrada en Downing Street con Blair, dos días antes de que trascendiese el nombre de Kelly como fuente de la BBC.
Entre los documentos presentados a lord Hutton figuran correos electrónicos, memorandos, cartas y todos los borradores y la versión final del polémico dossier sobre Irak divulgado en septiembre que está en el origen del caso.
Han sido entregados al juez por las partes implicadas, desde el Gobierno a la BBC, pasando por la familia del doctor Kelly.
Las pruebas revelan la extraordinaria presión a la que fue sometido el científico, cuyo cuerpo fue descubierto el 18 de julio en un camino entre bosques cercano a su casa, desangrado, a causa de un aparente suicidio.
Otro documento muestra que la policía llegó en un momento dado a planear el arresto de Kelly por otra filtración de datos de inteligencia a Andrew Gilligan, el periodista de la BBC que firmó la polémica noticia sobre el dossier.
El día en que el nombre de Kelly apareció en los periódicos como posible fuente de la BBC, responsables de seguridad en el Ministerio de Defensa debatían si Scotland Yard debía entrevistar al científico.
Los documentos demuestran que esa investigación se cerró una semana antes de la muerte de Kelly, quien se desconoce si llegó a enterarse de esa posible investigación.
Otra carta presentada al juez muestra la cólera de la familia del científico por las posibles filtraciones en su contra de miembros del Gobierno después de su muerte, como publicaba la prensa.
El abogado Peter Jacobsen, que representa a la viuda de Kelly, Janice, escribió a los letrados del Gobierno para saber si el Ministerio de Defensa era responsable de llamar ’’fantasioso’’ al asesor ya fallecido.
Tom Kelly, portavoz de Blair, fue quien hizo ese comentario, del que posteriormente tuvo que retractarse mediante una disculpa pública a la viuda del científico.