WASHINGTON.- Las fuerzas de ocupación estadounidenses e inglesas en Irak comenzaron a reclutar y entrenar a ex agentes del derrocado régimen de Saddam Hussein para mejorar su espionaje en el país árabe, según el diario "The Washington Post".
Los militares empezaron a usar al "otrora temido servicio de inteligencia iraquí para que ayuden en la identificación de las fuerzas de resistencia", afirmó el periódico.
Agrega que calificó como "una medida extraordinaria" la contratación, por parte de los ocupantes, de los ex agentes de un aparato de represión cuyos abusos y atrocidades se contaron entre los argumentos que Estados Unidos presentó para justificar la invasión de Irak.
Esta medida, según el periódico, "revela un creciente reconocimiento entre los funcionarios de la Casa Blanca de que las fuerzas estadounidenses -ya desplegadas excesivamente- no pueden por sí solas impedir ataques como el de la semana pasada contra la oficina de las Naciones Unidas" en Bagdad.
A pesar de las objeciones de algunos miembros del Consejo de Gobierno iraquí, designado por Washington, los ocupantes "han intensificado el reclutamiento (de ex agentes) en las últimas dos semanas".
"La única forma en que puede combatirse el terrorismo es mediante la información de inteligencia", dijo al diario un funcionario no identificado y agregó que "es la única forma en que podrá impedirse que los que hacen esos ataques sigan haciéndolos".
Para los ocupantes, "la primera línea de espionaje y obtención de información" sigue siendo la policía iraquí, que tiene unos 6.500 miembros en Bagdad y unos 33.000 en todo el país.
Pero esa fuerza policial, uniformada por los ocupantes, "tiene la desventaja de que carece de crédito ante una población desencantada y su contingente sigue estando por debajo de lo que los estadounidenses creen necesario para restablecer el orden en la capital", agregó el diario.
La contratación de ex agentes, según "The Washington Post", parece concentrarse en los miembros del servicio conocido como Mukhabarat, "cuya mera mención inspiraba temor en los iraquíes", era una de las cuatro ramas de las agencias de seguridad del régimen de Sadam.