CRAWFORD, Texas.- Presionado por el desmbolso que ha debido enfrentar Washingon en la reconstrucción de Irak, el Presidente estadounidense, George W. Bush amplió los poderes de su gobierno para confiscar bienes vinculados al derrocado régimen de Saddam Hussein.
Bush firmó una orden ejecutiva que permite al Gobierno confiscar los bienes de los familiares de 55 ex funcionarios del derrocado régimen iraquí, dijo la portavoz presidencial Claire Buchan.
La orden complementa otra de congelamiento de bienes firmada el pasado mes de mayo y acomoda la política estadounidense a una resolución de la ONU que busca que las confiscaciones se destinen a reconstruir al país.
Aunque esta nueva orden no congela nuevos bienes, le permite al gobierno estadounidense hacerlo en el futuro.
