MOSCU.- El ministro ruso de Defensa, Serguéi Ivanov, confirmó hoy la muerte de nueve de los 10 tripulantes en el naufragio del submarino nuclear "K-159" en el mar de Barents en la madrugada de hoy.
Sólo uno de los diez miembros de la tripulación del submarino pudo ser rescatado con vida tras el hundimiento del navío no muy lejos del lugar en el que naufragó hace tres años el "Kursk" con sus 118 tripulantes.
En tanto, sólo dos cadáveres, según confirmó también Ivanov, han sido rescatados a primera hora del día de las aguas árticas en que se hundió.
Un portavoz del Ministerio de Defensa dijo asimismo que el reactor nuclear del submarino K-159 fue desconectado antes que se hundiera en cerca de 3 millas náuticas (5,5 kilómetros) al noroeste de la Isla de Kildin.
Apenas el 28 de agosto pasado, el submarino de 40 años K-159 comenzó a ser remolcado sobre cuatro plataformas flotantes, desde la base en la población de Greminja, unos 350 kilómetros al oriente de la Península de Kola, para ser desechado en una planta de la población de Polaryne.
La noche del viernes, durante una tormenta, el submarino cayó de las plataformas y se hundió en aguas de unos 170 metros de profundidad, confirmó el ministerio.
Según las primeras investigaciones, durante la operación de remolque del submarino "se violaron todas las reglas imaginables sobre seguridad", tal y como indicaron fuentes del Kremlin.
El K-159 estaba fuera de servicio desde el 16 de julio de 1989. De acuerdo con expertos daneses el modelo puede transportar dos reactores nucleares y 86 tripulantes.
Este incidente recordó el hundimiento del submarino Kursk hace tres años en el Mar de Barents, donde murieron todos sus 118 tripulantes.