WASHINGTON.- Los terroristas de Al Qaeda están en EE.UU., pero son pocos y tienen una operación reducida que se dedica a recolectar fondos y facilitar el traslado de sus cómplices, afirmó hoy un jefe de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Esa red "existe, pero es muy pequeña", dijo el jefe de antiterrorismo y contrainteligencia en el FBI, Larry Meffords, quien precisó que tienen "evidencia de ello".
El Gobierno de Estados Unidos señaló a Al Qaeda como responsable por los ataques terroristas que el 11 de septiembre de 2001 dejaron más de 3.000 muertos en Nueva York, Washington y Pensilvania, y en octubre de ese año invadió Afganistán para destruir los campos de Al Qaida y derrocar al régimen Talibán.
Desde los atentados, el Gobierno del presidente de EE.UU., George W. Bush, creó un departamento de Seguridad Nacional y promulgó la "Ley Patriota", que ha ampliado y concentrado los poderes policiales del estado para una campaña antiterrorista dentro del país.
A finales de 2001 portavoces del gobierno y expertos en inteligencia sostenían que en Estados Unidos podía haber cientos de colaboradores de Al Qaeda, algunos integrados en "células durmientes" a la espera de las órdenes para atacar.
El Gobierno detuvo como sospechosas de terrorismo a más de 1.300 personas, en su mayoría musulmanes, a las que mantuvo durante meses incomunicadas, sin cargos judiciales ni defensa legal, hasta que cientos de ellos fueron deportados.
Meffords dijo hoy que los miembros o colaboradores de Al Qaeda en EE.UU. son pocos, y que el FBI no ha detectado individuos o células que estén planificando ataques.
La táctica del FBI -según Meffords- es que mantiene a los sospechosos bajo vigilancia tanto tiempo como sea posible para descubrir sus contactos con Al Qaida, en Estados Unidos y en el exterior.
Al mismo tiempo se analiza con cuidado cualquier posible ataque que puedan cometer, de manera que se les pueda arrestar en el momento crucial para impedirlo.
Sin embargo, los terroristas -advirtió el alto funcionario del FBI- "tienen la destreza para cambiar y adaptarse a su ambiente".
"Al Qaeda sigue siendo nuestra principal preocupación", añadió.