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Kirchner ordena investigar a militares que confesaron crímenes en dictadura

La investigación permitirá determinar "responsabilidades disciplinarias y/o penales que podrían caberles" al ex dictador Reynaldo Bignone (1982-1982) y a los generales retirados Albano Harguindeguy y Ramón Díaz Bessone.

08 de Septiembre de 2003 | 17:42 | AFP
BUENOS AIRES.- El Presidente argentino Néstor Kirchner ordenó este lunes por decreto abrir un expediente interno en el Ejército para juzgar a los ex jefes militares que confesaron a la televisión francesa crímenes y torturas perpetrados durante la última dictadura (1976-1983).

La investigación permitirá determinar "responsabilidades disciplinarias y/o penales que podrían caberles" al ex dictador Reynaldo Bignone (1982-1982) y a los generales retirados Albano Harguindeguy y Ramón Díaz Bessone, entrevistados por el francés Canal Plus.

Bignone, detenido por robo de bebés, admitió que se produjeron 8.000 desapariciones y aseguró que la tortura había sido aprobada por la Iglesia católica, lo cual fue desmentido la semana pasada en forma enérgica por la Conferencia Episcopal.

El último dictador también reveló que instructores franceses habían enseñado a los militares argentinos el método del secuestro, la tortura y la ejecución clandestina de personas.

Unas 30.000 personas desaparecieron en Argentina durante el régimen militar, según organismos de derechos humanos avalados por el Gobierno.

"¿Cómo puede sacar información (a un detenido) si usted no lo aprieta, si usted no tortura?", inquirió Díaz Bessone a su entrevistadora.

Díaz Bessone admitió en forma implícita que los desaparecidos fueron asesinados en la clandestinidad, al preguntar. "¿Usted cree que hubiéramos podido fusilar (legalmente) 7.000? Al fusilar tres nomás, mire el lío que el Papa (Paulo VI) le armó a Franco (dictador español) con tres. Se nos viene el mundo encima".

El ex jerarca siguió razonando en forma de pregunta: "¿Y si los metíamos en la cárcel, qué? Ya pasó acá. Venía un gobierno constitucional y los ponía en libertad. Porque esta es una guerra interna. No es el enemigo que quedó del otro lado de la frontera. Salían otra vez a tomar las armas, otra vez a matar".

Bignone, Díaz Bessone y Harguindeguy fueron acusados en los tribunales por graves violaciones de los derechos humanos, pero fueron beneficiados con indultos que concedió Carlos Menem cuando era presidente en 1990.

Las causas por terrorismo de Estado comenzaron a ser reabiertas este mes luego de que el Congreso declarara nulas las leyes de amnistía sancionadas en los años 80.
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