SEUL.- Más de 100 personas podrían haber muerto en Corea del Sur a causa del tifón "Maemi", el más potente del que se tengan registros en el país, según datos de hoy de la Protección Civil en Seúl.
Hasta la tarde del domingo se había confirmado la muerte de 85 personas, mientras que 30 siguen desaparecidas. Se cree que el número de muertos aumentará aún más debido a que se siguen encontrando cadáveres sepultados bajo edificios que se derrumbaron.
Las autoridades han tomado medidas para declarar zona de catástrofe las regiones más afectadas en el sur del país, decisión que según el gobierno podría tomarse el martes próximo.
Luego de la partida de "Maemi" en dirección al mar de Japón, las tareas de rescate fueron intensificadas con la ayuda de miles de cooperantes. También fueron destinados a la región más de 5.500 soldados para tareas de reparación, búsqueda de desaparecidos y apoyo a las personas que perdieron su hogar.
Las calles, campos y zonas cercanas a la costa siguen inundadas. Unas 25.000 personas fueron evacuadas por temor a los deslizamientos de tierra e inundaciones. La mayor parte de las víctimas se ahogó o murió por los aludes de tierra o electrocutadas.
El tifón arrasó el viernes por la noche la costa austral de Corea del Sur con vientos de hasta 216 kilómetros por hora y lluvias torrenciales. Se trata del tifón más potente desde que se iniciaron los registros meteorológicos en la península en 1904.
A su paso el tifón provocó inundaciones y aludes, soterró viviendas, generó cortes de energía y de las comunicaciones, derribó árboles y enormes grúas de construcción e hizo estragos en el mar.
Aunque las fuertes tormentas son frecuentes en Corea del Sur en el verano y principios de otoño, este tifón ha superado todas las previsiones de los expertos.
El Presidente surcoreano, Roh Moo Hyun, visitó hoy las zonas afectadas para hacerse una idea de la magnitud de los daños y hablar con las víctimas. El gobierno ha destinado ayuda por valor de 1,5 billones de won (1.350 millones de dólares).
