GINEBRA.- El agujero de la capa de ozono ha alcanzado de nuevo proporciones máximas hasta ahora sólo registradas tres años atrás, informaron hoy especialistas de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Los últimos datos de la OMM muestran que "el agujero de la capa de ozono alcanza ya una superficie récord de 28 millones de kilómetros cuadrados, equivalente a la registrada por primera vez en septiembre del 2000", señala un comunicado de ese organismo especializado de Naciones Unidas.
"Las mediciones efectuadas encima o en las proximidades de la Antártica muestran que la capa de ozono se debilita más rápido este año que en años anteriores", añade la nota.
El experto de la OMM en cuestiones relacionadas con el ozono, Michael Proffitt, no descartó que el agujero pudiera extenderse pero precisó que "difícilmente puede debilitarse aun más", al indicar que ese fenómeno se produce "cuando se registran muy bajas temperaturas y ahora la tendencia es más bien al aumento".
Proffitt apuntó que el mayor debilitamiento de la capa de ozono se registra en la estratosfera "a una altitud de entre 10 y 25 kilómetros en la zona de la Antártica, lo que afecta especialmente al cono sur de Latinoamérica, principalmente a Argentina y Chile".
El científico de la OMM precisó que resulta difícil calcular con exactitud la talla del agujero de la capa de ozono, ya que en realidad no es que desaparezca por completo sino que se reduce hasta niveles en que no filtran los rayos solares, lo que tiene "efectos perjudiciales par la salud de las personas" tales como cáncer de piel, cataratas y debilitamiento del sistema inmunológico.
La OMM destaca que tras la adopción en 1987 del Protocolo de Montreal, suscrito por 170 países, para reducir las emisiones de gases perjudiciales, como el halón y los clorofluorocarbonos (CFC), el empleo de los productos químicos que contribuyen a adelgazar la capa de ozono está estrictamente regulada.
Sin embargo, "la disminución de la concentración de esos productos químicos en la capa de ozono se efectúa con cierto retraso", señala la OMM y por ello concluye que "serán necesarias probablemente varias décadas antes de que la estratosfera recupere su estado anterior".