JERUSALÉN.- El presidente palestino, Yasser Arafat, ofreció hoy una nueva tregua a Israel en una entrevista exclusiva que ha concedido al Canal 2 (privado) de la televisión de este país.
En la entrevista, Arafat propone un alto el fuego general no sólo a los grupos armados palestinos sino también a Israel, en un acuerdo que estará dirigido por él mismo, y no como el anterior, que estuvo gestionado por el ex primer ministro Abu Mazen.
"Estáis invitados, ya os lo dimos a conocer ayer", dijo el presidente de la ANP en referencia a unas declaraciones que hizo el martes su consejero de Seguridad Nacional, Yibril Rayub.
Por el momento la ANP no ha informado de que hayan comenzado las gestiones para negociar la nueva tregua, pero un dirigente del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas) en Cisjordania, Adnán Asfur, confirmó hoy la existencia de contactos entre su movimiento y la oficina de Arafat.
Los contactos con el máximo líder político de Hamas, Jaled Mashal, residente en Siria, están a cargo de emisarios del secretario de Al Fatah en Cisjordania, Maruán Barguti, preso y bajo juicio en Israel.
Asfur reiteró que Hamas puede aceptar un alto el fuego siempre que reciba garantías de que Israel cesará su "guerra sin cuartel" y con los "asesinatos selectivos" contra sus dirigentes y militantes.
Arafat reiteró esta noche que "la ANP apoya la aplicación inmediata de la Hoja de Ruta" y "de los principios gestados en el proceso que comenzó en la Conferencia de Paz de Madrid" de 1991.
"No hay nada que pueda resistirse a la voluntad. Y si se quiere la paz, habrá paz. Una paz global y justa para los dos pueblos", subrayó.
Asimismo, recordó que el pueblo que está pagando el precio más alto en esta ola de violencia es el palestino.
"A mi sólo me interesa el sufrimiento del pueblo palestino", subrayó el presidente de la ANP al desestimar una pregunta sobre si está preocupado por su futuro personal.
El Gobierno israelí decidió el jueves que "Arafat es un obstáculo para la paz entre israelíes y palestinos que hay que hacer desaparecer", lo que ha sido interpretado como una declaración de intenciones de que el Ejército de Israel podría expulsarlo de la zona o matarlo.
Y Arafat, que está subido desde entonces a una ola de popularidad sin precedentes en el último año, calificó la decisión del Gobierno de Israel de "gran error".
"Ese hombre al que llaman Yasser Arafat y al que quieren expulsar ha sido elegido de forma democrática", recordó el rais al corresponsal israelí al explicarle la popularidad que ha ganado en los últimos días.
Una encuesta realizada por la Universidad A-Najah refleja que el 81,8 por ciento de los palestinos están satisfechos con el liderazgo de Arafat, un porcentaje 20 puntos por encima que la semana anterior.
Además, un 63,4 por ciento de los 1.372 encuestados se mostró convencido de que Israel no lo echará de la zona a pesar de sus amenazas.
Estos últimos días miles de personas han salido a las calles de Cisjordania, Gaza y de muchos países árabes e islámicos, para expresar su solidaridad con el "rais" y protestar contra la decisión de Israel, país que ayer se salvó de otra condena en el Consejo de Seguridad de la ONU por el veto que ejerció Estados Unidos.
Pero a pesar de todo ello, Israel se niega tajantemente a incluir al presidente de la ANP en cualquier proceso negociador y trata de convencer a la comunidad internacional de que "Arafat es parte del problema y no de la solución".
Además, el titular israelí de Exteriores, Silván Shalom, ya ha dado un portazo a la oferta de una nueva tregua.
"Desafortunadamente, los recientes ataques terroristas han demostrado que no habrá paz mientras las organizaciones terroristas conserven la capacidad de destruir, y la tregua ya la hemos probado así que no hay ninguna razón para probarla de nuevo", afirmó Shalom en rueda de prensa con su colega noruego, Jan Petersen.