LA PAZ.- El Presidente Gonzalo Sánchez de Lozada desautorizó a su viceministro de Hidrocarburos, Mario Requena, quien presentó a Chile como la mejor opción técnica y factible para la exportación de ese recurso natural, dos días antes de desatarse en Bolivia "la guerra del gas" en manifestaciones populares.
"Yo no conozco eso" y "hay que revisarlo", reaccionó Sánchez de Lozada, durante una conferencia de prensa la víspera en el palacio Quemado de La Paz, donde, sin poder disimular su enfado, desautorizó a Requena, cuyas declaraciones han encendido una fuerte polémica en el país.
"El Presidente soy yo", aclaró ante la insistencia de un periodista local por demostrar la contradicción oficial.
Antes que decidir desde qué puerto en el Pacífico se embarcará gas boliviano a mercados de ultramar, el mandatario dijo que el pueblo, cuyas instituciones se consultan desde la víspera, debe primero decidir si quiere o no exportar gas.
Un autoproclamado Estado Mayor del Pueblo, que reúne a sindicatos, cívicos y militares y policías en retiro y el Movimiento Al Socialismo, principal fuerza de oposición, han convocado a protestas en todo el país en férrea oposición a la exportación de gas, gerenciado por petroleras extranjeras, y más aún "por y para Chile", país con el cual Bolivia mantiene un antiguo diferendo marítimo.
Durante una cita con periodistas, Requena respaldó la elección del puerto chileno de Patillos, en desmedro del peruano de Ilo, que compiten por participar de un millonario proyecto de exportación de gas boliviano a ultramar, que demandará una inversión privada de unos 5.000 millones de dólares.
