LONDRES.- El gobierno argentino hizo llegar su pedido de extradición del ex diplomático iraní Hadi Soleimanpur al gobierno británico, que decidirá antes del 23 de octubre si la justicia lo examinará, informó HOY una fuente judicial.
Hadi Soleimanpur, ex embajador iraní en Buenos Aires, fue detenido el 21 de agosto en conformidad con una orden de captura internacional presentada por un juez argentino que investigaba sobre un atentado antijudío que causó 85 muertos el 18 de julio 1994 en la capital argentina.
La solicitud de extradición de Argentina estaba acompañada por un documento de 2.600 páginas, precisó James Heines, quien representa al gobierno argentino.
Hadi Soleimanpur, en libertad bajo fianza, deberá presentarse nuevamente ante el tribunal el 23 de octubre, decidió el juez del tribunal de Bow Street.
Para esa fecha, el ministerio del Interior deberá decidir si el pedido de extradición debe ser examinado o no por la justicia británica. También deberá precisar si el gobierno argentino debe presentar documentos adicionales para ese caso.
El ex embajador de 47 años, oficialmente estudiante de turismo en Gran Bretaña, había sido liberado bajo fianza el 12 de septiembre mediante la entrega de unas 700.000 libras (aproximadamente un millón de dólares).
El jefe de la comunidad judía de Argentina, Abraham Kaul, protestó enérgicamente contra esta liberación bajo fianza.
Unas 500.000 libras fueron depositadas por el gobierno iraní y 200.000 libras por los padres del ex diplomático, precisó Heines.
Por otra parte, una persona prometió depositar 5.000 libras a la justicia en caso de fuga del diplomático iraní, que no posee su pasaporte y debe presentarse todos los días a la policía. Solieimanpur y su esposa acaban de depositar una fianza de 40.00 dólares.
El abogado del ex embajador, Alan Jones, entregó a la justicia la nueva dirección de su cliente a partir del lunes. Se trata de una vivienda londinense financiada por el gobierno iraní. Soleimanpur, padre de dos niños, residía hasta ahora en Durham (nordeste de Inglaterra).
El ciudadano iraní, quien se encontraba en el tribunal londinense de Bow Street el viernes, no fue interrogado. Fue recibido por algunos manifestantes iraníes que agitaban carteles denunciando los actos terroristss.
Su detención provocó el deterioro de las relaciones entre Irán y Gran Bretaña.
La residencia y la embajada del Reino Unido en Teherán sufrieron en diversas ocasiones tiroteos desde que se abrió el caso a principios de septiembre, mientras continúa el ballet diplomático entre los dos países.
Londres pidió el lunes al gobierno iraní asumir su "responsabilidad" en la protección de la embajada británica en Teherán, reclamando "medidas inmediatas" de protección y la creación de una investigación para evitar los tiroteos.
