NAIROBI.- La mayor conferencia sobre el Sida en África comenzó hoy en Nairobi con una fuerte crítica a las naciones occidentales por gastar mucho más en la guerra contra el terrorismo que en ayudar al continente a tratar la enfermedad.
El enviado especial de las Naciones Unidas Stephen Lewis se apartó de un discurso preparado para describir la falta de fondos para los niños huérfanos a causa del Sida como una "obscenidad grotesca".
"Podemos encontrar más de 200.000 millones de dólares para librar una batalla contra el terrorismo pero no podemos encontrar el dinero para prevenir que los niños vivan en el terror", dijo Lewis en la ceremonia inaugural de la XIII Conferencia Internacional sobre el Sida y las Enfermedades de Transmisión Sexual en África.
Lewis aseguró que África se tambalea por la carga de una creciente población de huérfanos, que alcanza los 13 millones, y que se debe hacer más para proveer de tratamiento a los padres con el virus HIV para evitar que los números sigan creciendo.
Por otra parte, las Naciones Unidas presentaron un informe en el que dicen que, a pesar de que se aseguró más dinero para luchar contra la epidemia del Sida en África, los fondos utilizados aún representan menos de la mitad de la cantidad necesaria para tratamiento básico y prevención.
La organización UNAIDS indicó que se gastaron alrededor de 950 millones de dólares en programas en el África Subsahariana en 2002. Esto significa un aumento del 75 por ciento desde 2000, pero no alcanza los 2.000 millones de dólares que se estiman necesarios.
El informe dice que hay tres grandes desafíos que necesitan atención: el acceso a tratamiento antirretroviral, lidiar con el impacto desproporcionado de la epidemia en las mujeres y asegurar que la respuesta a las crisis humanitarias, como el hambre en el sur de África, tome en cuenta el efecto del Sida. "Nunca lograremos un avance contra el Sida si esperamos las condiciones perfectas antes de entrar en acción", aseguró Michel Sidibe, de UNAIDS.
Sidibe dijo que alrededor de 60 millones de personas han sido afectadas directamente por el HIV en África. De ellas murieron 15 millones, 30 millones son HIV positivos, y muchos otros son niños que perdieron al menos a uno de sus padres a causa de la enfermedad.