NACIONES UNIDAS.- El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, justificó hoy ante la 58 Asamblea General de la ONU la invasión de Irak y reiteró que "el régimen de Saddam Hussein tenía lazos con el terrorismo y construía armas de destrucción masiva".
"(Saddam) usó esas armas en actos de asesinato masivo y se negó a informar sobre ellas cuando así se lo exigió el mundo", manifestó Bush en su intervención ante el plenario de la Asamblea.
Sin hacer alusión a la incapacidad para encontrar esas armas seis meses después de la invasión, el presidente estadounidense subrayó que Saddam Hussein había desafiado a la comunidad internacional y que, gracias a la coalición aliada que invadió Irak, ese país es "libre".
Bush restó importancia a los "desacuerdos" en la comunidad mundial sobre la necesidad de usar la fuerza en Irak y consideró que lo importante ahora es defender "nuestra seguridad colectiva" y los "compartidos valores en defensa de los derechos humanos".
"Estos compromisos permanentes nos invitan a hacer frente a una gran tarea en el mundo, una tarea que debemos afrontar juntos. Por lo tanto, miremos hacia delante", dijo el Presidente.
Futuro de Irak y ayuda de la ONU
Sobre el futuro de Irak, reconoció que hay "pruebas difíciles y desafíos por delante", pero subrayó que "la vida ha mejorado con la libertad" y que "los pueblos de todo Oriente Medio están ahora más seguros porque un agresor inestable ha sido expulsado del poder".
Bush mencionó de pasada las negociaciones para acordar una nueva resolución en el Consejo de Seguridad sobre la reconstrucción de Irak y se limitó a manifestar que "Estados Unidos trabaja con amigos y aliados para tener una resolución que expanda el papel de la ONU en Irak".
"Como en la posguerra de otros conflictos, Naciones Unidas debería contribuir en el desarrollo de una nueva Constitución, la formación de funcionarios civiles y la celebración de elecciones libres y justas", señaló el Mandatario estadounidense.
Añadió que "la meta principal de nuestra coalición en Irak es el autogobierno para el pueblo iraquí de manera ordenada y por medios democráticos. Este proceso se debe desarrollar según las necesidades de los iraquíes, sin prisas ni retrasos según los deseos de otros".
Bush no estableció una agenda concreta para dar esos pasos y pidió a la comunidad internacional que apoye al consejo de Gobierno iraquí, auspiciado por Estados Unidos, como "la verdadera institución representativa que hay en ese país".