LA PAZ.- Una caravana solidaria partió hoy de la ciudad de La Paz con el objetivo de rescatar de forma pacífica a los más de cien viajeros que se encuentran retenidos por grupos de campesinos en una población del altiplano andino de Bolivia.
Los vehículos, dispuestos por el Defensor del Pueblo, y las iglesias Católica y Metodista, salieron a las 06:00 hora local (10:00 GMT) para traer los viajeros varados desde el pasado día 14 en Luquisani, a unos 300 kilómetros al norte de La Paz.
Antes de decidir el envío de la caravana, estas instituciones, conjuntamente con la Asamblea Permanente de Derechos Humanos del país (APDHB), lograron la conformidad de la organización campesina que lidera la medida de presión, dijo a EFE la responsable interina de la oficina del Defensor del Pueblo, Carmen Beatriz Ruiz.
Con esta acción se pretende evitar un enfrentamiento entre las fuerzas del orden y los agricultores, como el acontecido el sábado pasado en Warisata, también en la zona andina, donde un soldado y cinco civiles, entre ellos una niña de ocho años, murieron.
La intercesión del Defensor del Pueblo, la Iglesia y la APDHB tiene como objetivo poner fin a un conflicto que hoy cumple su undécimo día.
El pasado día 15, los agricultores del altiplano, dirigidos por la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), comenzaron el bloqueo de caminos para reclamar a las autoridades que atiendan un pliego de variadas demandas económicas y sociales.
Los manifestantes protestan también contra la intención gubernamental de exportar las reservas de gas natural del sur boliviano a Norteamérica.
La situación en Luquisani es crítica debido al bloqueo a que son sometidos "entre 130 y 300 viajeros", según dijo a EFE el vicepresidente de la APDHB, Sacha Llorenti.
Los afectados, entre los que hay niños, ancianos y mujeres, se encuentran retenidos desde el pasado día 14 en esa localidad, donde comienzan a escasear los alimentos y la atención médica por ser un pueblo muy pequeño y con servicios escasos.
La labor del grupo mediador no se limita únicamente al rescate de los rehenes. El miércoles solicitaron a las autoridades que se sienten a negociar con la CSUTCB para acabar con las hostilidades.
Al respecto, Ruiz señaló que "el gobierno sólo se ocupa del conflicto cuando está fuera de sí, con muertos y después de una semana", y opinó que cuando interviene "lo hace con medidas de fuerza, en lugar de medidas de desarrollo y análisis de las demandas" sociales.