PEKIN.- China calificó a Estados Unidos de "arrogante" y cargado de "prejuicios" en respuesta a un informe del Congreso estadounidense sobre la situación de los derechos humanos en el país asiático.
En dicho documento, EE.UU. urge la visita de un investigador de las Naciones Unidas especializado en torturas y destaca, por otra parte, que entre 1998 y 2000 más de 300.000 chinos fueron detenidos por un periodo superior al permitido por la ley.
"Este documento sólo demuestra arrogancia y prejuicios", dijo en Pekín el portavoz del ministerio chino de Asuntos Exteriores en declaraciones que publica hoy la prensa local.
Aunque el informe estadounidense, que se realiza de forma anual, descalifica las restricciones religiosas y de libertad de expresión en China, reconoce los avances en la reforma legal, base para una mayor libertad en el futuro.
Kong Quan no criticó en su respuesta al documento ningún punto en concreto y acusó de forma general a Washington de utilizar sus propios estándares sobre derechos humanos para humillar a Pekín.
"Es un hecho obvio para todos que la situación de los derechos humanos en China y su sistema legal están en el mejor momento para garantizar un desarrollo continuado", prosiguió.
El informe estadounidense destaca asimismo la "tibia" respuesta del Ejecutivo presidido por Hu Jintao a la crisis de la neumonía atípica, que se cobró la vida de 350 personas sólo en China.
El año pasado la Oficina de Información del gobierno chino publicó un duro informe sobre la violación de los derechos humanos en EE.UU., país al que criticó por su alto grado de violencia social, poco después de la emisión de un informe similar por parte de Washington.