BOGOTÁ.- El escrutinio del referendo celebrado el sábado en Colombia fue suspendido hoy cuando se había contabilizado el 97,94 por ciento de los colegios electorales, por lo que habrá que esperar al recuento que hará a partir del lunes el Consejo Nacional Electoral para conocer los resultados finales.
Ninguna de las 15 preguntas de la consulta para decidir medidas contra la corrupción y el control de gastos estatales alcanza aún el umbral mínimo para validarlas, según los resultados disponibles hasta ahora.
Cada una de esas preguntas debe contar con un mínimo de 6.267.443 de votos para ser avalada.
La pregunta que está más cerca de lograr su aprobación es la relativa a la lucha contra la corrupción política, a la que le faltan 10.667 sufragios para ser válida.
El Presidente de Colombia, Álvaro Uribe, admitió hoy el tropiezo del Gobierno en el referendo del sábado y pidió "respeto a la democracia, amor a Colombia y disciplina para buscar soluciones".
La Registradora Nacional de Estado Civil, Almabeatriz Rengifo, atribuyó en un comunicado la falta de resultados finales a problemas de orden público y errores de procedimiento de los jurados de votación.
Afirmó además que esas razones "no afectan la credibilidad del proceso" y dijo que, en contra de lo sucedido en anteriores elecciones, no hay una sola impugnación sobre los resultados de los colegios electorales en el país y en el exterior.
Presidente Colombiano al borde del fracaso
Colombia celebró este fin de semana una doble jornada electoral, ya que, además del referendo del sábado, los ciudadanos eligieron el domingo a 937 alcaldes, 1.090 concejos municipales, 30 gobernadores y 31 asambleas legislativas departamentales.
El Presidente de Colombia, Álvaro Uribe, enfrenta el riesgo de sufrir el más grave revés en sus 14 meses de gobierno debido a que las propuestas claves de su referendo fiscal y político se encuentran en peligro por la elevada abstención y la poca votación para aprobarlas.
Pese a que Uribe, de 51 años, tiene una popularidad del 75 por ciento, la más alta que haya gozado un Presidente en la historia de este país de más de 40 millones de habitantes, no logró en las urnas una copiosa aprobación de las iniciativas del referendo.
El Mandatario dedicó las últimas semanas a promover la votación afirmativa de las iniciativas del referendo en programas de radio y televisión de gran audiencia.
Pero las propuestas de la consulta contaban con la oposición de sindicalistas, educadores y dirigentes políticos que llamaron a la abstención o a votar por el "no".
Los críticos de las propuestas del referendo, banderas electorales de Uribe en su camino hacia la presidencia, argumentaron antes de la votación que las mismas no eran suficientes para solucionar los graves problemas económicos y sociales como el desempleo y la pobreza.
Propuestas fiscales, claves para la economía
Las dificultades económicas y sociales se suman a un conflicto interno de casi cuatro décadas en el que las Fuerzas Militares enfrentan a guerrilleros izquierdistas y escuadrones paramilitares de ultraderecha. La confrontación dejó 40.000 muertos en los últimos dos lustros.
Colombia registró un déficit de 3,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el 2002, el cual pretende recortar a 2,8 por ciento este año y a 2,5 en el 2004.
El gobierno proyectaba ahorros por unos 7.000 millones de dólares en los próximos siete años, la mayoría a través del congelamiento de salarios, pensiones y gastos del Estado.
Las iniciativas, sobre todos las fiscales, eran consideradas claves para restablecer la confianza de los inversionistas en la quinta economía de América Latina que registró un crecimiento de 1,67 por ciento en el 2002.
Analistas políticos y económicos dijeron que ante el eventual fracaso de las iniciativas del referendo, Uribe deberá tramitarlas de inmediato a través del Congreso para dar un mensaje de tranquilidad a los mercados y a los inversionistas que esperaban la aprobación de las reformas en las urnas.
Unos 270.000 efectivos de las Fuerzas Militares y de la policía participaron en un dispositivo de seguridad en todo el país para garantizar las votaciones y evitar eventuales ataques de la guerrilla.
Sin embargo, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la principal guerrilla del país con 17.000 combatientes, incendiaron vehículos, bloquearon carreteras, atacaron patrullas y cuarteles en acciones que dejaron al menos 13 muertos entre civiles y militares.
El hecho más grave se registró en una planta procesadora de leche del municipio de Yarumal, en el noroccidental departamento de Antioquia, donde la explosión de una bomba dejó seis civiles muertos.
Este domingo los colombianos acudirán a una segunda jornada electoral para elegir alcaldes, gobernadores, concejales y diputados.