BOGOTÁ.- El Gobierno de Colombia aceptó este martes la propuesta del ELN de entregar a siete extranjeros secuestrados desde hace 46 días en el norte del país a una comisión integrada por dos jefes de esa guerrilla, miembros de la ONU y la Iglesia católica.
"Hay luz verde, hay muy buena voluntad", aseguró el sacerdote Darío Echeverry, miembro de un comité de la Iglesia que busca la liberación de los rehenes, tras reunirse con el Presidente, Álvaro Uribe, y el alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo, en el Palacio de Gobierno.
El aval del Mandatario se dio un día después de que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció que los turistas serían liberados a partir de la próxima semana en la Sierra Nevada de Santa Marta (norte), empezando por el español Asier Huegun Etxeberria.
Uribe aceptó que la comisión que se trasladará a esa zona esté integrada por los portavoces del ELN, Francisco Galán, recluido en la prisión de alta seguridad de Itagüí (noroeste), y Felipe Torres, excarcelado el 8 de octubre.
"El señor Presidente está de acuerdo con la definición jurídica de las condiciones que permitan la salida de Francisco Galán del centro penitenciario para acompañar a esa comisión que va a recibir a todos los secuestrados", manifestó Echeverry.
Asimismo, el Gobierno autorizó que miembros de la misión de la ONU en Bogotá participen en la comisión que recibirá a los siete turistas, secuestrados el 12 de septiembre en la Sierra Nevada (950 km al norte de Bogotá).
"El señor Presidente se enteró de primera mano de la voluntad de los señores del ELN y nosotros tenemos en este momento el conocimiento de la voluntad del Presidente, ambos son favorables a la liberación de los secuestrados", añadió.
El comité eclesiástico planea reunirse el jueves con los voceros del ELN en la cárcel de Itagüí para precisar algunos aspectos de la liberación.
"Estamos precisando la propuesta del ELN, retomando la voluntad del señor presidente y vamos viendo cómo se conjugan esas dos voluntades para que se llegue a una salida incruenta al secuestro. Nosotros seguiremos construyendo ese puente y definiendo un mecanismo que haga viable y efectiva esa liberación", añadió Echeverry.
Los delegados de la Iglesia señalaron que, por ejemplo, es necesaria una zona de seguridad para los voceros rebeldes que harían parte de la comisión.
Aunque el ELN no exigió el cese de operaciones militares en la zona como condición para liberar a los turistas, el tema, según la Iglesia, deberá ser también definido por el Gobierno para garantizar la seguridad de los rehenes.
"Creo que ese asunto tendrá que definirlo el Gobierno y tendrá que mirar cómo sería la forma para hacer viable la entrega de estas personas. Eso evidentemente tiene unos procedimientos militares que se deben tomar en estos casos", comentó por su parte monseñor Héctor Fabio Henao, también miembro del comité.
El anuncio del ELN fue comunicado vía radioteléfono por el jefe militar y número dos de ese grupo, Antonio García, a Echeverry, Henao y al arzobispo de la ciudad de Medellín, monseñor Alberto Giraldo, quienes acudieron la víspera a una reunión con Galán en la prisión de Itagüí.
La propuesta se dio luego de que la semana pasada la comisión reanudó sus gestiones en favor de los rehenes, después de permanecer cuatro días hace unas tres semanas en Santa Marta -ubicada al pie de la Sierra Nevada-, sin ser contactada por los rebeldes.
Tras ese fracaso, el ELN había anunciado la liberación de Etxeberria, de origen vasco, como un "gesto de solidaridad con la lucha del País Vasco", pero ello fue rechazado por Uribe señalando que no permitiría un "show internacional".
Etxeberria, los israelíes Beni Daniel, Ortaz Ohayon, Ido Joseph Guy y Erez Altawil, el británico Mark Henderson y la alemana Reinhilt Weigel fueron secuestrados cuando visitaban las ruinas arqueológicas de Ciudad Perdida, en la Sierra Nevada.
